El famoso presentador de Sálvame ha dicho de la Secretaria General del PP que “no es que esté en el partido equivocado sino que directamente no tendría que estar, porque no se puede salir en pantalla con el pelo mojado, en mitad del aperitivo, a hablar de escuchas ilegales”.
Jorge Javier ha visitado este miércoles esRadio para ser entrevistado por Federico Jiménez Losantos, pero también por el Grupo Risa, cuyos integrantes le han puesto en algún que otro aprieto. “Me llama Federico pero no Francino, con el que me crucé el otro día en el AVE y ni siquiera me miró”, ha comentado el rey de la sobremesa televisiva, que a lo largo de su trayectoria profesional no ha escondido nunca su respeto por Federico Jiménez Losantos.
Natural de Badalona, cree que actualmente no hay ningún problema lingüístico en Cataluña, aunque si viviera en Arenys de Munt no hubiera votado en el referéndum separatista convocado por su alcalde.
Jorge Javier Vázquez vota socialista, pero confiesa que actualmente no tiene a quién votar. “Una vez me llamó un amigo para que asistiera a un mitin de Zapatero en Cataluña y yo le sugerí que lo consultara primero. Jamás me devolvieron la llamada”. El presentador de Sálvame vive “puerta con puerta” con Leire Pajín a cuya madre admira expresamente porque le parece “muy valiente… ¡para ponerse en contra de su hija!”, lo que da pie a pensar que esa relación de vecindad permite conocer de primera mano el genio de la actual secretaria de organización del PSOE.
También ha habido tiempo para otros cotilleos políticos, especialmente sobre María Teresa Fernández de la Vega, a quien también admira desde que cierta vez acudió a comer a un restaurante de Vilanova y la Geltrú “y pidió al camarero que le pusiera en un tupper el arroz sobrante”, todo un ejemplo de austeridad que deberían aplicarse otros dirigentes en estos tiempos de profunda crisis económcia.
Pero no sólo ha hablado de los socialistas, además de su frase sobre Cospedal y cuando ha llegado el turno de otro referente intelectual cuyas peripecias vitales son seguidas puntualmente por millones de telespectadores, Belén Esteban, que últimamente permanece en lo más alto del “candelabro” a cuenta de las denuncias formuladas al defensor del menor en su contra.
De ella ha dicho: “Aunque Belén no ha leído nunca un libro y sólo compra La Razón por la revista que regalan, creo que se traga todos los telediarios porque entiende bastante de política. De hecho ella sabe por qué Mariano Rajoy no despega en las encuestas”.
Jorge Javier Vázquez, fan incondicional de Paloma San Basilio, afirma que no hace telebasura sino “neorrealismo televisivo”. Tal vez en una de estas sesiones de “Fast TV” la Esteban decida exponer su tesis sobre la inoperancia electoral de Rajoy, colaboración que sin duda será muy bien recibida en la calle Génova, y, quién sabe, igual hace que acabe contratada por el gabinete del político gallego como asesora de imagen.
Un referente televisivo como Belén Esteban, a quien escuchan devotamente y de forma diaria más de cinco millones de personas, sería el complemento ideal de Arriola, cuyos consejos sobre cómo hacer llegar el mensaje del PP a los votantes siguen teniendo, ay, un efecto más que discreto.