Tras la aplastante victoria del PP en el 22-M, el Gran Wyoming hizo un parodia sobre un ‘cambio de chaqueta político’ en el que, para estar en sintonía con el cambio de poder, su equipo se hacía "de derechas". Tanto el presentador como sus colaboradoras continuaron con la broma durante varios días, saliendo en pequeños sketches ataviados "como los fachas que somos": banderas de España en los tirantes, gomina... Dentro de este teatrillo, hablaban del movimiento 15-M, desacreditándolo.
Todo habría quedado ahí, si alguien al otro lado del charco no hubiera dado con las imágenes de esta parodia, y se las hubiera creído. Es lo que ocurrió con un medio de la televisión argentina, el Canal 9, que en uno de sus debates políticos habló sobre el movimiento 15-M, y mencionó el papel que estaban jugando los medios españoles en las protestas de los indignados. Así, el presentador dijo que los medios de "ultraderecha" española decían constantemente que "ETA estaba detrás de todo esto". Y acto seguido, puso un vídeo de Wyoming, haciendo bromas sobre ello: "Habría que tener una venda en los ojos para no ver que ETA ha organizado las manifestaciones del 15-M", decía, ataviado con los tirantes de España. Diversos tertulianos argentinos criticaron estas palabras, defendiendo a los indignados, comparándolo con el "corralito bancario".
El showman se hizo eco de la confusión de los argentinos, devolviéndoles las bromas. Wyoming dijo que entendía la confusión, y que ellos les confundían con una tele de derechas pero "nosotros confundimos a los argentinos con italianos sin dinero". Acto seguido, su copresentadora preguntaba cuál era la manera de demostrarles que no eran de "ultraderecha", a lo que Wyoming le contesta: "¿Cómo puedo demostrar que El Intermedio no es un programa de derechas? Si lo fuéramos, no estaríamos dando noticias, estaríamos pidiendo dinero", dijo, en referencia clara a la campaña de Intereconomía, de la que se mofan llamándola "Save the fachas".
Días después, Wyoming le preguntó a otra colaboradora si "ya saben en Argentina que hacemos una parodia y que no somos un programa de derechas". Ella contestó afirmativamente, y le lanzó otra pulla a los argentinos: "Quiero aclarar que en Argentina no hay partidos de derechas y partidos izquierdas, sino que hay partidos corruptos y partidos más corruptos". El director de El Intermedio aseguró que era "la misma fórmula que funcionó en Marbella".