(Libertad Digital) El Pleno del Congreso de los Diputados ha convalidado este lunes por abrumadora mayoría los dos decretos ley que contiene el plan de ayuda a la banca del Gobierno que, además, gracias a los votos de PSOE, PP, CiU, PNV y UPyD no se tramitarán como proyectos de ley, tal y como pedían el resto de los grupos.
Zapatero: "La intervención pública es necesaria e insustituible"
Antes de la votación, durante el debate, Zapatero ha vuelto a parapetarse tras los EEUU para eludir responsabilidades en la crisis económica. Sin embargo, reconoce que nuestra economía tiene problemas para obtener financiación y señala que en este caso "la intervención pública es necesaria e insustituible". Sobre la ampliación de garantía de depósitos, ha dicho que "aunque esta medida no era necesaria, hemos considerado conveniente reforzar la confianza".
En su explicación, Zapatero se ha referido al Plan Paulson como "la intervención pública más importante desde la crisis del 29 en EEUU", donde ha vuelto a situar el origen de la crisis. Recordando la quiebra de Lehman Brothers o los rescates de Merrill Lynch o Freddie Mac y Fannie Mae, el presidente ha señalado el estallido subprime en agosto de 2007 como el origen de especulaciones "absolutamente irresponsables" con "activos tóxicos". Algo que "más de un año después" ha provocado que "la situación financiera internacional se precipite con inusitada gravedad".
Una contaminación a la que "no ha sido ajena Europa", según el presidente, que ha recordado que ya son varias las entidades alemanas, inglesas, danesas y del Benelux, las que han necesitado algún tipo de intervención pública. "Todos estos acontecimientos", ha dicho Zapatero, "han puesto en riesgo de colapso el sistema financiero" generando una "necesidad imperiosa de una acción coordinada a nivel internacional".
Estas son, según el presidente, las razones que justifican que los “países de la UE” asuman “el compromiso de tomar las medidas necesarias”, como la de “abordar los problemas de financiación bancaria, asegurar las condiciones de liquidez apropiadas, facilitar el acceso a la financiación de las entidades financieras y reactivar el acceso al crédito de familias y empresas”.
Vuelve a hablar de "solidez"
No obstante, pese al "riesgo de colapso" y la "necesidad imperiosa" de tomar medidas, Zapatero ha vuelto a decir que nuestro sistema financiero es "sólido" y que "nuestros bancos y cajas no evidencian problemas de solvencia que aconsejen medidas de recapitalización". En cambio, afirma que se han aprobado estos dos decretazos "por cautela y para restablecer la confianza". En su opinión, "la política fiscal prudente" de su Ejecutivo, ha permitido "tener un nivel de deuda reducido" que facilita "la adopción de estas medidas".
En cuanto al aumento de garantías de depósitos, ha señalado que, "aunque esta medida no era necesaria, hemos considerado conveniente reforzar la confianza de los depositantes a la vista de las dificultades en las entidades de otros países". Pese a todo, Zapatero ha señalado que "en estos momentos, la intervención pública es necesaria e insustituible"
Entrarán en vigor en noviembre
Además, el presidente ha anunciado que aprobará un crédito extraordinario de 10.000 millones de euros ampliables hasta los 30.000 millones para permitir, en lo que queda de año, la compra de activos a las entidades financieras. Asimismo, ha informado de que la habilitación de los créditos necesarios para completar la dotación máxima del fondo para comprar activos -50.000 millones- se incluirá en la tramitación parlamentaria de los Presupuestos Generales del Estado para 2009.
Zapatero explicó que los activos de "máxima calidad" se adquirirán a partir de noviembre y serán cédulas hipotecarias o bonos de titulización respaldados por préstamos de familias y empresas no financieras. También ha dicho que para garantizar que la financiación llegue a empresas y ciudadanos, el fondo primará la adquisición de activos respaldados por nuevo crédito, es decir, los otorgados después del 7 de octubre de 2008.
Pero el Gobierno, no decidirá sobre los beneficiarios de los créditos. Preguntado por las garantías que solicitarían a los bancos para asegurar que esa financiación llegaría a familias y Pymes, Solbes dijo en la presentación del decreto que "no es labor del Gobierno decirle a los bancos cómo manejar su cartera".
En cuanto al decreto-ley que recoge la posibilidad de que el Estado conceda avales a las operaciones de financiación que hagan las entidades financieras en España, insistió en que el objetivo que persigue es el de ayudar a reducir la incertidumbre que hay sobre estas entidades para la financiación a medio plazo.
El presidente recordó que desde este año se podrán avalar hasta 100.000 millones de euros, aunque no concretó cuál será el importe máximo durante 2009. José Luis Rodríguez Zapatero señaló que "más allá" de las medidas urgentes tomadas en España y en el resto de la UE es necesaria una reforma de la regulación y la supervisión bancaria.
Así, insistió en la necesidad de "ampliar el perímetro" del control y la supervisión, incluyendo a todos los agentes financieros que hagan peligrar la estabilidad; reforzar la regulación internacional de exigencias de capital para aumentar los márgenes de seguridad del sistema y reducir la posibilidad de quiebra de las entidades.
Informes cada dos meses
Zapatero explicó que el desarrollo reglamentario de los decretos incluirá la obligación de que el secretario de Estado de Eocnomía, David Vegara, informe cada dos meses a la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso, ya que Vegara será el presidente del comité técnico encargado del fondo para la compra de activos y estará acompañado por representantes de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y del Banco de España.
Además, el Gobierno facilitará información de las operaciones en la página web del Ministerio de Economía, en el Boletín Oficial del Estado, así como de las directrices de las inversiones estatales que se realicen en el sector financiero. Por otra parte, el Banco de España emitirá un informe bimensual y otro cuatrimestral con los detalles de los créditos bancarios.
"No estoy de acuerdo con crear una comisión de investigación. Si podría estar de acuerdo en que la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso trabaje, evalúe y formule propuestas para el gran debate sobre el nuevo modelo del sistema financiero internacional. Un debate que es urgente", señaló el presidente del Ejecutivo.
Rajoy y la "mesa camilla"
Rajoy, por su parte, ha mantenido su apoyo a estos decretos extraordinarios, aunque lo ha combinado con duras críticas como que "es un asunto de difícil explicación a los ciudadanos que miran con asombro como el Gobierno les insta a poner encima de la mesa grandes cantidades de dinero para los bancos". "Es el mundo al revés, los ciudadanos prestando dinero a los bancos", apostilló. Además consideró que "sería un gravísimo error no contar toda la verdad de este asunto y sus implicaciones a los ciudadanos". Y eso que él lo apoya.
Ha vuelto a exigir mayores medidas de control, y en este punto también fue muy crítico con lo que él mismo ha anunciado que va apoyar. Sobre el Consejo rector designado para controlar el uso de los fondos, Rajoy dijo que "es una mesa camilla que se podía reunir en casa de Solbes porque son subordinados suyos".
En relación con el diagnóstico que hace Zapatero de la crisis apuntando a EEUU como el origen de las turbulencias, Rajoy recuerda que además de tener una crisis de liquidez también sufrimos una crisis de solvencia y de confianza. En su opinión, lejos de situar el origen de la crisis únicamente al otro lado del Atlántico, Rajoy recuerda que en España sufrimos “una crisis previa, muy profunda” y que se evidencia por “el aumento del paro, la pérdida de competitividad y la grave crisis de los motores productivos como son la industria y la construcción.”.
En este sentido, para Rajoy “lo peor que podría hacer usted hoy es utilizar la situación internacional como parapeto para eludir las responsabiidades de la situación que ha contribuido a generar”. El líder de la oposición ha recordado que, “el gigantesco esfuerzo económico que hoy le planteamos a los ciudadanos, quedará en nada si no va acompañado de otras reformas que se necesitan urgentemente”
Para Rajoy “las cifras marean, hablamos de 150.000 millones de euros, el 15% de la renta nacional”. Por eso, cuestiona la medida por cuanto tiene de excepcional, ya que “jamás un Gobierno de España ha tenido en sus manos semejante poder económico y de decisión”.
En este sentido, recuerda que “hablamos de enormes cantidades de dinero público” por lo que dice que es necesario dejar claro “qué criterios se van a utilizar para materializar la operación”. El desarrollo reglamentario de los decretazos necesita dejar claro, para Rajoy, “qué se va a comprar, a quién se le va a comprar, a qué precio, a quién se va a avalar y a quién no”.
Que llegue a familias y empresas
Rajoy también ha dudado de que este plan llegue finalmente a familias y empresas, su principal demanda en este asunto. "Tenemos que garantizar que el dinero cicrule por donde tiene que circular y asegure las necesidades de crédito de familias y empresas". Pese a sus dudas, ha decidido apoyar los decretos.
También tiene dudas de que el Gobierno vaya a aplicar los mecanismos de supervisión y control que le demandan los populares, pese a que el Gobierno se ha comprometido a ampliar el control sobre estos decretos. Rajoy demanda que se evite, mediante el férreo control de las medidas aprobadas, que la discrecionalidad de la que dispone el plan se convierta en arbitrariedad y los ciudadanos nunca sientan como suyo el plan de rescate. “Las familias asfixiadas por la hipoteca, los parados, los jóvenes que no pueden acceder a una vivienda, también necesitan un plan de rescate y el Gobierno se ha olvidado de ellos”, ha dicho.
Entre los controles que solicita el PP se encuentra la aplicación “de los requisitos que utiliza el BCE para sus operaciones de financiación. Más control institucional y la importante presencia del Banco de España”.
Pese a todo, apoyarán el decreto
Rajoy ha criticado duramente las medidas aprobadas por Zapatero por decreto, pero ha señalado su disposición a aprobarlos por “responsabilidad” y por “el interés general de los españoles”.
Solbes y Montoro pactaron este fin de semana el desarrollo de los decretos
Pese a las críticas de Rajoy a los dos decretazos, fuentes del PP han confimado, según Efe, que el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, y el portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, pactaron el fin de semana el desarrollo de los decretos de apoyo al sistema financiero. Según las citadas fuentes, Solbes y Montoro mantuvieron varias conversaciones para consensuar los reglamentos de desarrollo de los decretos, que Zapatero anunció que quiere que entren en vigor en diez días.