(Libertad Digital) Las cifras de paro y afiliación a la Seguridad Social presentadas por el Ministerio de Trabajo este martes “suponen una auténtica quiebra de nuestro mercado laboral” para la Unión Sindical Obrera (USO), una organización que se ha desmarcado del discurso sindical de CCOO y UGT y que reclama la eliminación de las subvenciones para los representantes de los trabajadores.
Para USO es prioritario que el Gobierno “emprenda acciones dirigidas a taponar la hemorragia del desempleo, sólo así será posible empezar a generar nuevo empleo. Empleo que es necesario para estabilizar y garantizar nuestro sistema de protección social”.
El sindicato explica que asiste “con enorme preocupación al silencio y complacencia de los agentes sociales que, tras la última reunión del diálogo social, siguen acordando y discutiendo agendas y calendarios de nuevas reuniones sin abordar ninguna medida que aborde cómo solucionar el más importante de los problemas que tiene hoy en día la ciudadanía: el desempleo y las nulas expectativas de encontrarlo”.
De hecho, la patronal CEOE ha puesto sobre la mesa la necesidad de efectuar reformas en el mercado laboral y CCOO y UGT se niegan en redondo. Para estas formaciones la sangría laboral no es suficiente causa para enfrentarse al Gobierno, pero si los empresarios logran que se flexibilice el mercado (como piden todos los agentes económicos nacionales e internacionales) entonces los dos grandes sindicatos podrían ponerse en pie de guerra.
Además, USO recuerda que las cifras de desempleados demandantes de empleo en las oficinas públicas es de 3.720.158 parados y “a este ritmo superar los 4 millones será un hecho en el primer semestre de 2009”. La diferencia entre el volumen de paro registrado que publica el Ministerio de Trabajo (3.327.801) y los parados demandantes de empleo se explica por el “maquillaje estadístico”, tal como adelantó LD.
Así, se sacan de las listas del paro registrado a desempleados desde hace meses –en febrero el entonces ministro Jesús Caldera creó el marco legal para hacerlo- desvirtuando las estadísticas y dificultando un análisis certero sobre los problemas del mercado laboral español.
Fuente: Ministerio de Trabajo e Inmigración
Cuando lleguemos a los 4 millones que dimita Corbacho
Desde USO emplazan al ministro Celestino Corbacho, que manifestó que no alcanzaríamos la barrera de los cuatro millones de parados, a que presente su dimisión en el mismo instante que alcancemos esta trágica cifra.
“Ya no pueden seguir excusándose en la crisis de la construcción, cuando el paro en el sector industrial se empieza a disparar (7,82%). Esta crisis del sector industrial se verá agravada por los nuevos ERE que se están produciendo, en especial en el sector del automóvil. El lunes se anunciaba el del Grupo PSA, al que el ejecutivo asiste sin dar ninguna respuesta, como ya han hecho otros gobiernos europeos”, explica el sindicato.
La crudeza de la situación se pone de manifiesto al ver la evolución de la demanda de prestaciones registradas, que en el mes de diciembre de 2008 ascendió a 582.299, lo que representa un 67,7 % más que en el mismo mes del año anterior.
Los beneficiarios existentes a final de mes fueron 2.318.355, con un incremento respecto al mismo mes del año anterior del 50,7%. Los gastos totales de diciembre de 2008 ascendieron a 2.293 millones de euros, lo que supone un aumento del 62,9% respecto al mismo mes del año anterior.
Incremento del déficit público
La pregunta que se hace USO es qué incremento del déficit público se va a producir para atender esta situación, ya que “junto a un mayor gasto en prestaciones tenemos un menor ingreso por cotizaciones”. Es llamativo que un mes como enero, tradicionalmente bueno para el empleo, arroje 349.569 cotizantes menos de variación intermensual, “todo un record para el señor Corbacho”.
Desde el sindicato se “urge” al Gobierno a “que deje de enumerar medidas , que evalúe las que dicen que han emprendido, que sea crítico con su actuación y piense en soluciones a corto y medio plazo para, en primer lugar, realizar inversiones dirigidas a frenar la actual hemorragia; en segundo lugar a estabilizar el mercado laboral y en tercero, a generar empleo neto, empleo cualificado y de calidad”.