CC.OO., UGT y la patronal firmaron este miércoles un acuerdo para desbloquear los convenios colectivos pendientes de 2009 e iniciar antes de que acabe el año las negociaciones para un nuevo acuerdo interconfederal de negociación colectiva.
Sin embargo, los sindicatos no quieren que el acuerdo acabe en papel mojado y dieron a los empresarios un plazo de entre 15 días y un mes para que hagan efectivo este compromiso y cumplan con su parte antes de dar cualquier paso.
Así lo manifestaron en rueda de prensa los secretarios de Acción Sindical de CC.OO. y UGT, Ramón Górriz y Toni Ferrer, respectivamente, tras rubricar el acuerdo con los secretarios generales de CEOE y de Cepyme, José María Lacasa y Elías Aparicio.
Concretamente, Górriz indicó que "la prueba del algodón será lo que suceda desde mañana", día en el que ya se convocarán las comisiones paritarias negociadoras para hacer un seguimiento del cumplimiento del acuerdo. "Es muy importante lo que pase en los próximos días para recuperar la confianza", apostilló.
Por su parte, Ferrer indicó que los convenios pendientes están "hipotecando" la negociación colectiva a futuro y calificó el acuerdo de "reto de responsabilidad y coherencia". "Lo que está en juego es mucho más que la negociación colectiva de 2009, es el futuro de las negociaciones colectivas", apostilló.
Por todo ello, los sindicatos harán una "evaluación" una vez transcurrido el plazo para verificar que los empresarios han cumplido y entonces decidirán si siguen adelante con la negociación colectiva para 2010. Al respecto, Ferrer señaló que el grado de cumplimiento se ciñe a que se desbloqueen "todos" los convenios colectivos pendientes.
Por su parte, Lacasa aseguró que "el acuerdo ya ha dado sus frutos" a la vista de los convenios colectivos desbloqueados en las últimas semanas, como es el caso del sector del metal, aunque aseguró que las manifestaciones convocadas en este sector no han tenido nada que ver.
Además de no querer hablar de plazos, el secretario general de la CEOE indicó que la intención de su organización es dar solución al "mayor número posible" de convenios. En su opinión, el acuerdo supone un compromiso para que entre todos se pueda "rematar el año en las mejores condiciones posibles".
El paso siguiente
En el caso de que la evaluación que realicen los sindicatos sea positiva, ambas organizaciones se sentarían antes de finalizar el año para negociar un nuevo acuerdo interconfederal para la negociación colectiva (ANC), para el que los sindicatos proponen un acuerdo trianual.
Tanto sindicatos como empresarios se mostraron a favor de estudiar la posibilidad de desarrollar el contrato a tiempo parcial en el marco de la negociación bilateral antes de sentarse a hablar de ello con el Gobierno, que ya lo planteó como parte de la alternativa que supone adoptar el modelo alemán en el mercado laboral.
Con todo, Górriz aseguró que los sindicatos están "en condiciones" de alcanzar acuerdos en este sentido, mientras que Ferrer condicionó cualquier fecha a las dificultades que vayan surgiendo y advirtió: "Va a haber dificultades".
Desde la CEOE, se confió en poder abordar más adelante otras cuestiones como los contratos a jóvenes, el absentismo y todo lo que sea buscar una fórmula para alcanzar una mayor flexibilidad interna en las empresas.
El "diálogo social" tiene que esperar
En cuanto al valor del acuerdo de cara a reabrir el diálogo social, los sindicatos dejaron claro que aún es pronto para hablar de ello. Górriz se limitó a decir que, "en función del compromiso por parte de la CEOE, se estaría abriendo una puerta a la recuperación del diálogo social".
Por su parte, el secretario de Acción Sindical de UGT pidió que se deje de tomar el diálogo social como "la fórmula para solucionar el problema del modelo productivo".
Por otro lado, los sindicatos aseguraron que no existe contradicción entre el acuerdo firmado hoy y la manifestación convocada para el próximo 12 de diciembre, puesto que ésta "no va contra nadie", en palabras de Górriz.
Según Ferrer, el objetivo de la movilización es "estratégico" y persigue una "salida solidaria" para los trabajadores frente a la "ineficacia" de las medidas puestas en marcha por el Gobierno y frente a los que quieren "sacar ventaja" en plena crisis. Sin embargo, insistió en que "no tiene que sorprender a nadie" y en que "no es un contrasentido".
Por su parte, Lacasa aseguró que la CEOE no se siente "destinataria" de la manifestación convocada por los sindicatos y recordó que la patronal prevé celebrar una gran conferencia empresarial el próximo 2 de diciembre, a la que estarán invitados los sindicatos, para presentar sus propuestas contra la crisis. Sin embargo, apostilló que a los empresarios "les gusta más esa vía que otras", sentenció.
Por último, el secretario general de Cepyme indicó que la manifestación de los sindicatos "no debe empañar el valor del acuerdo" firmado hoy y no debería incidir en el compromiso adquirido.