LD (L. Ramírez) El Gobierno presentó su Fondo Estatal de Inversión Local como un gran plan de gasto público (8.000 millones de euros) destinado a promover proyectos municipales de obra pública que sacaran a desempleados de las listas del paro.
Con esta iniciativa el presidente del Gobierno prometía crear cientos de miles de empleos y sacar de la UVI al mercado laboral, que está expulsando a 7.000 personas cada día, con una pérdida de más de un millón de afiliados en los últimos doce meses y 4 millones de parados sin el maquillaje estadístico del Ministerio de Trabajo.
Tras la guerra de cifras entre Moncloa y el Ministerio de Administraciones Públicas para calibrar el alcance de este plan (se llegó a decir que en abril ya se crearía empleo), los datos del propio Gobierno muestran la cruda realidad:
El presidente del Gobierno anunció este miércoles que el Fondo Estatal de Inversión Local ha transferido hasta el 15 de abril 1.877 millones de euros a casi 5.000 municipios y ha ocupado a 155.000 trabajadores, de los que 57.000 son nuevos contratados. Es decir, que sólo un tercio de ellos estaban en paro.
En su intervención en el pleno del Congreso para informar de la remodelación del Gobierno, Zapatero recordó que este fondo cuenta con un presupuesto de 8.000 millones de euros para financiar 30.000 proyectos en todos los municipios españoles, informa Efe.
El Fondo ha aprobado ya 14.000 proyectos, lo que implica la puesta en marcha de dichas obras. Además de los proyectos ya aprobados, hay otros 3.000 que se abonarán en los próximos días, según aseguró el presidente.
El problema es que todos estos empleos son temporales. Cuando acaben las obras, (entre las que destacan proyectos tan esperpénticos como pistas de patinaje y boleras municipales) estos puestos de trabajo desaparecerán. Eso sí, España tendrá 8.000 millones menos y miles de kilómetros de carriles bici con nuevos semáforos. Sin olvidar los SPA rurales.