Así lo puso de manifiesto Rato durante la presentación de las conclusiones de la Comisión que preside y que fue impulsada por Unespa para analizar el efecto del envejecimiento de la población española en el Estado de Bienestar.
La Comisión también está formada por el ex secretario general de Empleo y abogado en ejercicio Juan Chozas, el ex ministro de Industria, ex ministro de Administraciones Públicas y responsable de estudios de la Fundación Alternativas, Juan Manuel Eguigaray, el ex secretario general de CC.OO. José María Fidalgo, el catedrático Víctor Pérez, el economista y profesor de la Universidad de Columbia Françesc-Xavier Sala-i-Martín y la presidenta de Unespa, Pilar González Frutos.
Alguno incluso llegó a afirmar que la actual crisis económica podría acelerar la entrada en déficit del sistema, ya que genera un pérdida importante en volumen de empleo y, por tanto, de cotizaciones al sistema.
Por este motivo, en el informe consideraran "muy aconsejable e incluso insoslayable" prolongar la vida laboral, ya que si se mantiene la tendencia actual, el sistema sufrirá una "insuficiencia de fondos" para pagar las pensiones a partir del año 2022, mientras que el problema se puede resolver, "o al menos mitigarse bastante", si se prolonga la edad efectiva de jubilación.
Aún así, la Comisión afirma que esta medida no resolverá por sí sola el problema, por lo que habrá que tomar otras medidas como suprimir la edad obligatoria de jubilación y alterar "profundamente" el sistema de incentivos de forma que inciten a trabajar más años y eliminen los elementos que impulsan a sacar del mercado laboral a los trabajadores de más de 50 años.
En este sentido, el informe pone de manifiesto que hoy en día se incita a los trabajadores a jubilarse lo antes posible y alerta de que el mantenimiento de esta situación podría hacer "inútil" cualquier medida dirigida a retrasar la edad de jubilación.
Para cambiar el sistema de incentivos, resalta la importancia de revisar las condiciones de acceso a la pensión y revisar las reglas del juego en el mercado de trabajo acabando con su "grave segmentación" y aumentando la flexiseguridad con mecanismos que permitan incrementar las tasas de empleo creando "opciones atractivas y flexibles". Según Rato, esto permitiría combinar el trabajo y el estudio a las generaciones jóvenes y el trabajo y el retiro a las mayores.
Combinar sistema público y privado
De la misma forma, la Comisión apuesta por una combinación de los sistemas de reparto y capitalización, lo que supone una mayor colaboración entre los ámbitos público y privado, e invita a este último a aumentar la transparencia, la gestión de los productos orientados a complementar las pensiones y a realizar un esfuerzo en materia de costes.
En esta misma línea, Rato se mostró partidario de desincentivar "de manera decidida" las jubilaciones masivas y reducir el uso de fondos públicos en las prejubilaciones porque "no tiene sentido" que el erario público las subvencione.
A pesar de las alarmas, el ex vicepresidente económico aseguró que "merece la pena" conservar el actual sistema de pensiones, aunque es necesario hacer una serie de reformas que tienen que partir de un "debate amplio" y hacer frente a las debilidades.
Reformar desde el debate y el consenso
Según indicó, el momento actual es el "idóneo" para iniciar este debate, ya que hay que aprovechar las bases del consenso que hoy existe sobre el tema y construir sobre él, aunque los consensos no deben ser "excluyentes" de las reformas.
Así, todos los miembros de la Comisión invitaron al Pacto de Toledo a avanzar en este sentido y a abrir el diálogo, ya que fue una iniciativa "muy positiva" que tiene que seguir siendo "consecuente y razonable" en materia de pensiones.
Además, Rato consideró que el debate no tiene que centrarse sólo en expertos o grupos políticos, sino que tiene que llegar a toda la sociedad, que debe recibir información "continua y detallada" sobre esta materia, tanto a nivel personal como agregado. Para conseguirlo, apostó por explorar comisionados independientes que garanticen la llegada de información a los ciudadanos.
Mejorar la gestión en sanidad y dependencia
Por otro lado y en cuanto a la Sanidad, la Comisión considera que el riesgo de sostenibilidad no vendrá por la propia evolución demográfica, sino por la evolución del gasto sanitario, por lo que recomienda tomar medidas de mejora de la gestión y de control del gasto sin menoscabar prestaciones.
Algo similar ocurre en materia de Dependencia, donde la Comisión apuesta por reevaluar la solidez y sosteniblidad del actual sistema de financiación, aunque tenga pocos años de vigencia.