(Libertad Digital) En una entrevista concedida al programa de Ana Rosa, en Telecinco, el presidente del PP reiteró su preocupación por la crisis económica y pidió al Ejecutivo “que gobierne como hicimos nosotros en 1996”,es decir, “que tome medidas” para superar el estancamiento del Producto Interior Bruto (PIB) en lugar de defender “que lo mejor es no hacer nada”.
Rajoy se ha referido también a la nueva ley sobre el aborto. A su modo de ver, el Gobierno la ha impulsado para desviar la atención de la población ante la crisis económica que vive el país. Para el líder del PP, lo que está haciendo el presidente es un drama: "Deberíamos tratar este tema con un poco más de delicadeza". Por eso, cree que es una "hipocresía" poner en la mesa este tema para distraer de los problemas ya que "eso no iba en el programa del PSOE".
A este respecto, hizo referencia a los esfuerzos de austeridad que puso en marcha el Gobierno de José María Aznar, para permitir a España entrar en el euro, ya que “entonces la tasa de paro superaba el 22 por ciento” y el resto de cifras macoeconómicas “eran un absoluto desastre”. Incluso alabó el papel de Miguel Boyer al frente de la política económica de Felipe González a principios de los años ochenta “porque analizó y gobernó, generando crecimiento económico”.
A su juicio, los problemas externos son el alza del crudo y la crisis de liquidez, mientras que los riesgos internos se derivan de la brecha de precios con la UE, el elevado déficit exterior y el aumento de paro, liderando la pérdida de puestos de trabajo comunitarios.
En cuanto a las soluciones, Rajoy consideró indispensable que el Gobierno elabore un “plan de austeridad de las Administraciones Públicas”, porque “del mismo modo que las familias y las empresas deben ajustarse el cinturón, también lo tienen que hacer los representantes públicos”.
Además, solicitó una rebaja de la tributación de las pymes, con un Impuesto de Sociedades que solo retraiga el 20 por ciento de los beneficios, ya que el tejido productivo español está basado en este tipo de empresas, vitales para el crecimiento económico nacional.
Bajar impuestos y aumentar la recaudación
En cuanto a los hogares, manifestó la "imperiosa necesidad de realizar una fuerte subida de las deducciones por compra de vivienda en el Impuesto de la Renta", de forma que las familias puedan hacer frente a la subida de sus cuotas hipotecarias derivada del repunte del Euribor en los últimos meses
Y todo ello “sin cercenar la recaudación tributaria, como sucedió cuando gobernamos nosotros”, dijo Rajoy en referencia a la reducción de la presión fiscal llevada a cabo por el entonces ministro de Economía, Rodrigo Rato.
Preguntado por el horizonte temporal de la crisis, el presidente del PP descartó fijar una fecha concreta y pidió a los españoles “tranquilidad”, pero que le pidan al Ejecutivo “que gobierne”.
“Las cosas están mal y es posible que en los próximos meses sea peor, pero si sabemos donde estamos lo que queremos podemos tomar decisiones correctas y salir de la crisis como hemos hecho en tiempos pasados. De momento el Gobierno no hace nada o se dedica a improvisar medidas sin sentido”, indicó Rajoy en referencia a la propuesta de Industria de regalar bombillas de bajo consumo, la deducción de 400 euros a los trabajadores fijos y la última polémica sobre la contratación de inmigrantes.
Buscan esconder la crisis
"Es una hipocresía utilizar un tema como este para no ocuparse de los verdaderos problemas, pido sensibilidad –argumentó–. La ley sobre la interrupción voluntaria del embarazo lleva más de 20 años en vigor y cuenta con un acuerdo muy generalizado entre la sociedad, es hipócrita que, para que no se hable de economía y ocultar el alcance real de la crisis, se ponga encima de la mesa este tema".
Rajoy manifestó la misma posición sobre la decisión de Baltasar Garzón de elaborar un censo de los desaparecidos durante el franquismo y la guerra civil para recuperar sus restos y criticó que se aborde este tema "con el mismo objetivo" que la interrupción voluntaria del embarazo: "distraer, dividir y generar tensión". "Es triste tener que estar hablando de la Guerra Civil 70 años después, y mi familia no estuvo en el bando de los que ganaron –continuó–. Pero en 1978 todos se pusieron de acuerdo para mirar al futuro, y además ya se apoyaron leyes de ayuda a las víctimas por unanimidad".
En este sentido, preguntó al Ejecutivo "qué es lo que se propone" porque estos asuntos no fueron incluidos en su programa electoral ni abordados por el presidente del Gobierno en su toma de investidura. "Ahora tenemos una crisis económica y vamos a tener una crisis política por la irresponsabilidad a la hora de fijar prioridades del Gobierno", advirtió.