En concreto, el Tesoro luso se ha visto forzado a ofrecer a los inversores una rentabilidad del 3,686%, frente al 2,045% ofrecido en la subasta de septiembre de 2010 ó el 1,960% abonado en una operación similar celebrada en agosto de ese mismo año.
No obstante, la subasta celebrada por el Tesoro portugués contó en esta ocasión con un ratio de cobertura de 2,6, por encima del 2,4 registrado en la anterior subasta del mismo tipo.
Tras conocerse el resultado de la operación, el coste de los seguros de crédito de la deuda portuguesa (CDS) subían a 503,4 puntos desde 491,4 enteros, mientra que la prima de riesgo de los bonos portugueses a diez años respecto a sus homólogos alemanes alcanzaba los 392 puntos básicos, según los datos del mercado secundario consultados por Europa Press.
En el caso de los bonos españoles a diez años, la prima de riesgo se mantenía ligeramente por debajo de 250 puntos básicos, en 247,5 puntos básicos tras la subasta en Portugal, mientras que los CDS subían a 339 puntos, desde 337,7.
Por su parte, los CDS de Grecia subían a 1.020,3 puntos básicos desde 1.015,6, mientras los de Irlanda alcanzaban los 630,5 puntos, desde 613,7 enteros, y los de Italia subían a 325,2 puntos, desde 231,3 enteros.