(Libertad Digital) Pese a que para muchos analistas el epicentro de la crisis económica que ha tambaleado los mercados y economías de todo el mundo ha sido la intervención de los bancos centrales (en especial de la FED y del BCE) sobre los tipos de interés, que han mantenido artificialmente bajos durante mucho tiempo, la administración Obama refuerza la supervisión financera dotando de más poderes al la Reserva Federal.
Precisamente, Alberto Recarte explica, en la reciente publicación del Informe Recarte 2009 (La Esfera de los Libros) cómo los bancos centrales generaron, mediante el mantenimiento de unos tipos de interés artificialmente bajos, la burbuja crediticia que ha desatado la crisis financiera internacional que sufre la economía mundial. Otros analistas nacionales e internacionales coinciden en este análisis.
No obstante, la Casa Blanca parece no estar dispuesta a admitir estos errores, a juzgar por el plan de reforma de supervisión gubernamental de los mercados financieros que han adelantado Tim Geithner, secretario del Tesoro de los EEUU y Lawrence Summers, director del Consejo Económico Nacional en un artículo publicado este lunes en The Washington Post. El objetivo de este plan será, según Geithner "proteger el sistema contra sus propios excesos".
"La meta es la creación de un régimen regulador más estable, que sea flexible y eficaz", indicaron Geithner y Summers. "Un régimen que sea capaz de asegurar los beneficios de la innovación financiera al tiempo que proteja al sistema contra sus propios excesos".
The Wall Street Journal ha informado este lunes de que la propuesta del Gobierno, que Obama podría lanzar el próximo viernes, incluye entre otros aspectos, un fortalecimiento del papel de la Reserva Federal y la creación de un nuevo organismo que vigile de cerca los productos financieros que se ofrecen a los consumidores.
Los funcionarios identificaron "cinco problemas clave del sistema regulador existente" que, según ellos, "desempeñaron un papel directo en la generación o magnificación de la crisis actual".
Los funcionarios identifican cinco problemas
En primer lugar, señalaron, "las regulaciones existentes se enfocan en la solidez de instituciones financieras, pero no en la estabilidad del sistema como un todo".
Y para atender este problema el gobierno de Obama propondrá "una elevación de los requisitos de capital y liquidez para todas las instituciones, con requisitos más estrictos para las firmas más grandes y más interconectadas".
Un segundo aspecto señalado por Geithner y Summers es que "la estructura del sistema financiero ha cambiado, con un crecimiento espectacular de la actividad financiera afuera del sistema bancario tradicional, como por ejemplo el mercado de títulos respaldados por activos".
"El plan del gobierno impondrá firmes requisitos de información sobre los aseguradores de títulos respaldados por activos; reducirá el grado en el que reguladores e inversores dependen de las agencias de calificación de riesgo y requerirá que el creador, patrocinador o vendedor de un título mantenga un interés financiero en su desempeño", explicaron.
En tercer lugar, añadieron, el sistema regulador actual "no ofrece protecciones adecuadas a los consumidores e inversores", por lo que el gobierno propondrá medidas para "combatir las prácticas predatorias de prestamistas en el sector de las tarjetas de crédito", según recoge Efe.
Summers y Geithner indicaron que "el gobierno federal no tiene las herramientas que necesita para contener y manejar las crisis financieras", por lo que Obama propondrá "el establecimiento de un mecanismo que permita la resolución ordenada de cualquier compañía financiera cuyo colapso amenace la estabilidad del sistema financiero".
Finalmente, indicaron, "vivimos en un mundo globalizado y las acciones que tomemos aquí, en nuestro país -no importa cuán inteligentes y sanas sean- tendrán poco efecto si no logramos elevar las normas internacionales junto con las nuestras".
"Encabezaremos el esfuerzo para mejorar la regulación y supervisión en todo el mundo", afirmaron los dos funcionarios del país que, según ellos mismos señalan, por falta de la regulación y supervisión adecuada precipitó "una contracción económica que ha golpeado a familias y empresas en todo el mundo".
El secretario del tesoro, Timothy Geithner, comparecerá el jueves ante el Senado y la Cámara de Representantes para explicar el plan y afrontar las críticas de los que se oponen a conceder un mayor peso a la capacidad de intervención del Estado.