(Libertad Digital) El comité de asesores económicos que acompañarán a Barack Obama en la difícil gestión de la crisis económica durante la presente legislatura está formado por 17 miembros.
Obama contará con los consejos de destacados economistas y empresarios, entre los que destacan el inversor Warren Buffett, los ex secretarios del Tesoro Robert Rubin y Lawrence Summers, el ex secretario de Trabajo Robert Reich, el consejero delegado de Google Erich Schmidt, y el ex presidente de la Reserva Federal Paul Volcker, entre otros, informa MoneyWeb.
Tras la reunión, Obama se enfrentará a los medios de comunicación por primera vez desde su victoria electoral el pasado martes. Además, se reunirá el lunes en la Casa Blanca con el aun presidente de EEUU, George W. Bush, que dejará el cargo el próximo 20 de enero.
Asimismo, el mercado centra toda su atención entre los candidatos que está barajando Obama para dirigir el Tesoro de EEUU, ya que este organismo será el encargado de llevar a cabo la operación de rescate financiera que, en principio, contará con una montante de 700.000 millones de dólares.
Geither, favorito para dirigir el Tesoro
Entre los candidatos a ocupar el cargo de secretario del Tesoro, destacan el ex secretario de dicho organismo durante la era Clinton, Lawrence Summers, y el presidente de la Reserva Federal de Nueva York, Tim Geithner, informa Bloomberg.
En las quinielas también suena con fuerza el nombre de Jaime Dimon, actual consejero delegado del banco JPMorgan Chase, así como el ex presidente de la Reserva Federal de EEUU (FED) Paul Volcker. Casi la mitad de los economistas consultados por Reuters apuestan por Geithner como nuevo secretario del Tesoro.
El rescate público de la automoción
El comité de asesores también tratará un plan para ayudar al sector de la automoción en EEUU, que se enfrenta a una crisis financiera y de ventas sin precedentes. Desde hace meses, los fabricantes de automóviles presionan a los funcionarios del Gobierno y a los diputados del Congreso para lograr una ayuda financiera de hasta 50.000 millones de dólares.
Sin embargo, el principal problema que ha de afrontar el nuevo Gobierno de Obama será la dura recesión que padece la economía estadounidense. La más intensa desde la crisis del petróleo de los años 70, tal y como avanzó LD. El PIB de EEUU cayó un 0,3% en el tercer trimestre del año.
Goldman prevé una caída del PIB del 2%
En este sentido, Goldman Sachs avanza una contracción del 2% en el cuatro trimestre de 2008, y de un 1% en los tres primeros meses de 2009. Además, ante tal desplome del PIB, el banco prevé que la tasa de paro aumente hasta el 8%.
El economista de la entidad, Jan Hatzius, avanza que Obama estudia la posibilidad de impulsar en breve un nuevo plan de estímulo fiscal superior a los 200.000 millones de dólares. Una medida que, incluso, podría aprobarse antes de la toma de posesión de Obama como presidente, prevista para el próximo 20 de enero.
Plan de estímulo fiscal de hasta medio billón de dólares
De hecho, los analistas esperan que dicho paquete ascienda, como mínimo, a 300.000 millones de dólares e, incluso, la devolución de impuestos podría alcanzar el medio billón de dólares. Y ello, mediante una primera inyección este mismo otoño, y una segunda para enero o febrero, según los analistas de la entidad.
Goldman también espera que la Administración facilite la modificación de la condiciones de hipotecas a millones de familias que corren el riesgo de ser embargadas, así como aumentar los plazos para iniciar las ejecuciones hipotecarias a 90 días.
Por otro lado, Goldman prevé que algunas de la principales propuestas anunciadas por Obama durante la campaña electoral, tales como la reforma del sistema sanitario y el impulso de las energías renovables, se aplacen uno o dos años, a la espera de poder contar con una mayoría demócrata sólida en las cámaras de representantes para evitar su bloqueo en el Senado o el Congreso.
Hatzius añade que el déficit presupuestario del país se disparará, al menos, durante los dos próximos años. "La probabilidad de una depresión económica es muy baja a no ser que la Fed y el Gobierno cometan errores", algo que el analista no espera que acontezca.