Navarra pretende revolucionar el sector público foral mediante numerosas medidas enfocadas a mejorar la eficiencia de su administración. Y es que, por primera vez en España, alguien plantea abiertamente liberalizar el rígido sistema de contratación de empleados públicos, basado en el acceso mediante oposición y con carácter vitalicio, propio de los funcionarios.
El Parlamento de Navarra aprobó el pasado 1 de octubre el denominado Plan Moderna, un proyecto lleno de objetivos políticos y retos económicos con el fin de cambiar el modelo productivo de la comunidad foral en un plazo máximo de 20 años. El texto, que contó con el voto a favor de los principales grupos de la Cámara (UPN, socialistas y CDN) y el rechazo de Izquierda Unida (IUN-NEB) y los nacionalistas de Nabai, contempla acciones concretas en diversa áreas para impulsar el futuro desarrollo económico de Navarra.
Dentro del sector público, destaca una iniciativa que supone una auténtica revolución: "Suprimir el carácter vitalicio de los funcionarios". Así viene recogido en el texto oficial -I y II- (página 11) del Plan publicado por el Boletín Oficial del Parlamento de Navarra el pasado 22 de septiembre. De este modo, las principales fuerzas políticas de la Comunidad Foral (UPN y PSN), que en la actualidad gobiernan en coalición, se han comprometido a revisar en un futuro próximo el sistema funcionarial vigente, en el que los empleados públicos que acceden a la plaza mediante oposición gozan de un puesto laboral de por vida.
Es decir, el Gobierno Foral se compromete a configurar en los próximos años un nuevo sistema de contratación por el que los "futuros" empleados públicos no gocen de "carácter vitalicio" en determinados puestos o ámbitos de la Administración, según fuentes oficiales consultadas por Libertad Digital.
La medida ha causado una intensa polémica entre los sindicatos navarros. El nacionalista ELA denunció que dicho plan supone "un ataque a todas las personas trabajadoras de la Administración". Sin embargo, dicha supresión en ningún caso afectaría a los actuales funcionarios, ya que el Plan Moderna tan sólo plantea esta posibilidad de cara a los futuros empleados públicos.
Lo curioso es que esta medida ha contado con el apoyo no sólo de la Confederación de Empresarios (CEN) sino también de los sindicatos UGT y CCOO. Pero tras la denuncia de ELA ambas organizaciones se han sumado a las críticas y han presionado al Gobierno navarro para suprimir este punto del texto definitivo. Y es que, al parecer, los responsables de CCOO y UGT encargados de negociar el Plan Moderna "no se habían leído el texto y luego pasa lo que pasa", según fuentes conocedoras de la negociación. De hecho, este polémico punto ha sido suprimido del Plan de Acción del proyecto, que resume las principales actuaciones que contempla el proyecto.
Pese a ello, este objetivo permanece "intacto" en el texto completo del Plan Moderna. Así pues, el Gobierno navarro mantiene que estudiará la supresión del carácter vitalicio de los futuros funcionarios forales. Sin duda, se trata de un cambio cualitativo en el vigente sector público español. Navarra es la primera administración que se compromete a estudiar esta posibilidad, lo cual constituye una auténtica revolución administrativa.
Pero no es la única medida. El citado Plan contempla numerosas mejoras en la Administración Foral. Entre ellas, destacan las siguientes (pulse aquí para ver el listado completo):
1. Dar al cliente un servicio óptimo:
Acciones a corto plazo
• Analizar cada servicio para determinar la manera más adecuada de prestarlo y para que se pueda decidir qué servicios se prestan directamente y cuáles a través de terceros.
• Estudiar la financiación óptima de los servicios.
• Disponer de un buen sistema de medición de la eficiencia de los servicios (calidad y coste) y de la satisfacción de los clientes.
• Crear una "ventanilla única" que centralizará los servicios de información, asesoramiento, tramitación unificada, etc.
• Establecer un sistema telemático como medio de comunicación preferente entre la Administración y los usuarios de los servicios públicos para facilitar su relación.
[...]
3. Dotarse de la mejor organización
Acciones a corto plazo
• Desarrollar modelos de contratación que permitan disponer de las personas adecuadas (preparadas y motivadas) y suficientes para optimizar la estructura-organización interna
• Flexibilizar el estatuto de empleado público.
• Capacitar al personal de la administración garantizando su acceso a la formación tanto técnica como de otra índole (p. ej: trabajo en equipo).
• Suprimir el carácter vitalicio de los funcionarios.
• Establecer una carrera para los funcionarios basada en el mérito y no en la antigüedad.
• Establecer un sistema de evaluación continua en función de los resultados.
• Replantearse la estructura por departamentos y valorar la existencia de un "mando ejecutivo" por debajo del Presidente (p.ej., un Director de la Administración).
• Optimizar la estructura de las empresas públicas que forman parte de la Corporación Empresarial de Navarra, analizando procesos de fusión, privatización, absorción, etc.
Acciones a medio y largo plazo
• Asegurar un sistema de selección que permita la posterior movilidad y la evaluación por competencias.
• Instaurar un procedimiento mediante el cual se pueda recolocar a las personas de acuerdo a las necesidades para evitar recursos ociosos.
• Avanzar en la profesionalización del funcionario.
• Ilusionar a los funcionarios haciéndoles partícipes de los objetivos públicos.
• Avanzar en un sistema de contabilidad analítica que permita disponer del coste de prestación de los servicios y en la evaluación de los resultados y de la eficiencia pública.
El documento completo consta de más de 500 páginas y contiene "la visión de la economía, la educación y el empleo de Navarra en el horizonte de 2030", con sus objetivos concretos en cada uno de los ámbitos y 458 acciones.
Sus principales objetivos son: "Crear más prosperidad, situando a Navarra entre las veinte primeras regiones europeas en PIB per cápita y con una distribución equitativa de la riqueza (actualmente Navarra ocupa el puesto 32 de las 271 regiones europeas); lograr un mayor desarrollo humano situando a Navarra entre las diez primeras regiones europeas en el Indicador de Desarrollo Humano (IDH) mediante una asistencia sanitaria de máxima calidad y un sistema educativo excelente como grandes fortalezas de Navarra; y conseguir una mayor sostenibilidad medioambiental, situando a Navarra entre las veinte primeras regiones europeas en este parámetro".