El ex presidente de Endesa carga contra la política de subvenciones públicas y aboga por invertir en "talento" para mejorar la productividad de España. (Volver)
HispanoL dijo el día 31 de Enero de 2011 a las 11:25:48:
Ciertamente, las subvenciones desvían los recursos de la sociedad hacia donde se les antoja a los políticos de donde los destinaría la sociedad. Adremás la sociedad, el "mercado", maximizaría la eficiencia de esos recursos.
A la larga, una sociedad basada en subvenciones es una sociedad que ha dilapidado sus recursos, ha dedicado su tiempo y sus recursos humanos y materiales a aquello que no es realmente demandado y que se forma además una sociedad sin productividad suficiente.
Por otra parte, los intervencionismos regulatorios asociados a esa mentalidad causan un bloqueo masivo de la iniciativa, de la innovación, del cambio y de la adaptación permanentes que el mundo y la vida misma exigen para sobrevivir.
Las subvenciones y el intervencionismo, el estatismo en suma, impiden la capacidad de adaptación al entorno. A la larga, la sociedad estatista se descubre a sí misma atrasada respecto a las sociedades más libres. El estatismo lleva a una sociedad al fracaso y a la extinción.