LD (EFE) El presidente, los ministros y diputados van a sufrir un recorte salarial del 15%, para ayudar a los planes del Gobierno de ahorrar unos 1.000 millones de euros y situar el déficit presupuestario en el 3% del Producto Interior Bruto (PIB).
Los diputados, además, no recibirán dietas ni primas mientras dura la crisis, según anunció el ministro de Economía serbio, Mladjan Dinkic, en la emisora B92.
Los sueldos de los ministros serbios son actualmente de algo más de 100.000 dinares (unos 1.075 euros) , y los de los diputados, junto con dietas y primas, pueden superar más de dos veces esa suma, cuando el salario medio en el país es de unos 300 euros.
El presidente Boris Tadic tiene una remuneración de unos 1.400 euros al mes.
Las nuevas medidas, que han de ser aprobadas por el Parlamento, afectarán también al enorme aparato de funcionarios, cuyo número ha ido creciendo sin cesar desde los cambios democráticos del año 2000 y que deberá ser reducido en un 10 por ciento en los próximos nueve meses. Una medida que, el Gobierno advierte, será sólo el comienzo.
Esta decisión fue tomada después de las protestas sindicales que generó un paquete de medidas aprobado el mes pasado, que incluía congelar sueldos y pensiones e introducir un impuesto adicional del 6 por ciento sobre los ingresos mayores de 130 euros.
Las nuevas medidas supondrán el recorte del 10% para los sueldos de más de 430 euros y del 15% para los que superan los 1.075 euros.
Los diputados, además, no recibirán dietas ni primas mientras dura la crisis, según anunció el ministro de Economía serbio, Mladjan Dinkic, en la emisora B92.
Los sueldos de los ministros serbios son actualmente de algo más de 100.000 dinares (unos 1.075 euros) , y los de los diputados, junto con dietas y primas, pueden superar más de dos veces esa suma, cuando el salario medio en el país es de unos 300 euros.
El presidente Boris Tadic tiene una remuneración de unos 1.400 euros al mes.
Las nuevas medidas, que han de ser aprobadas por el Parlamento, afectarán también al enorme aparato de funcionarios, cuyo número ha ido creciendo sin cesar desde los cambios democráticos del año 2000 y que deberá ser reducido en un 10 por ciento en los próximos nueve meses. Una medida que, el Gobierno advierte, será sólo el comienzo.
Esta decisión fue tomada después de las protestas sindicales que generó un paquete de medidas aprobado el mes pasado, que incluía congelar sueldos y pensiones e introducir un impuesto adicional del 6 por ciento sobre los ingresos mayores de 130 euros.
Las nuevas medidas supondrán el recorte del 10% para los sueldos de más de 430 euros y del 15% para los que superan los 1.075 euros.