Desde el pasado mes de octubre, el porcentaje de ahorro en depósitos apenas ha variado como consecuencia de la caída de los tipos de interés, que ha restado atractivo a este tipo de productos, y de la menor capacidad de ahorro de las familias por el incremento del paro y la crisis económica.
En concreto, las bajadas de tipos de interés aplicadas por el Banco Central Europeo (BCE) redujeron la remuneración media de los depósitos a plazo hasta el 3,12% en febrero, lo que supone un descenso del 1,4 puntos porcentuales desde el mismo mes del año anterior.
Por el contrario, desde febrero de 2008 hasta octubre del pasado año los depósitos se convirtieron en la mejor arma de las entidades para captar financiación, lo que provocó que las familias fueran reduciendo de manera progresiva su capital en cuentas a la vista para destinarlo a depósitos.
No obstante, a pesar de que las entidades tienen más dificultades para contratar nuevos depósitos -- éstos se redujeron en un 12% en febrero-- el saldo vivo continuó creciendo hasta los 409.247 millones, un 16% más que hace un año antes.
Del total, 366.853 millones se encontraban invertidos en productos con un plazo de hasta dos años, mientras que unos 42.393 millones en productos con un plazo superior.