(Libertad Digital) “Se puede decir con absoluta certeza que el paro superará los tres millones probablemente en los primeros meses de 2009. A partir de ahí, se manejan diferentes escenarios, en función de lo que crezca la población activa, cuanto pueda caer la actividad y otros factores", explicó este martes el presidente de la Comisión de Economía de la CEOE, José Luis Feito a Onda Cero.
El responsable del área económica de la patronal española mostró su preocupación por un futuro que considera “bastante aterrador” si no se estabiliza el sector financiero, algo que, a tenor de los planes de rescate –el último ha sido en Francia- no parece muy cercano.
De todas formas, CEOE no quiere tirar piedras sobre las previsiones del Gobierno y Feito señala que "cabe la posibilidad" de que en la segunda parte del próximo año se inicie un "ligero rebote" de la actividad económica, que podría continuar en años venideros si "no se hacen locuras en política económica".
Pero recuperar la economía no es lo mismo que lograr un sistema productivo que cree empleo. Feito explicó que, según la experiencia española, el desempleo podría seguir subiendo en paralelo a la supuesta recuperación económica, como ocurrió en la crisis de los 90.
Entonces, el punto más bajo del ciclo se registró en 1993, cuando la economía española entró en recesión, mientras que el paro continuó su escalada y no llegó a su máximo hasta 1994. CEOE teme que 2009 sea “el segundo año de la historia española en la que el crecimiento económico sea negativo”, es decir, que caiga el PIB.
En su opinión, la resolución de la crisis financiera "es una condición indispensable para que la crisis económica sólo sea seria y grave" y no un desastre total. "Si no se resolvieran las tensiones financieras estaríamos hablando de algo más apocalíptico que una crisis económica", advirtió Feito, que indicó que si las turbulencias financieras se resuelven antes de la llegada de 2009, las consecuencias reales de lo que está sucediendo serán "más visibles".
Empresas y familias se beneficiarán de ayudas
En cuanto a las medidas adoptadas por el Gobierno para ayudar al sistema financiero, el presidente de la Comisión de Política Económica de la CEOE se mostró convencido de que contribuirán a aliviar la situación de las familias y las empresas.
"Si las entidades financieras utilizan las inyecciones de liquidez para sanear su balance, quiere decir que, si no hubiera inyecciones de liquidez, la única posibilidad de sanear su balance sería restringiendo brutalmente el crédito, mucho más de lo que lo han hecho. Así que, por definición, estas medidas van a ir para familias y empresas", argumentó.
A su juicio, el objetivo fundamental de estas medidas es estabilizar el sistema financiero y eso significa al mismo tiempo una bajada del Euríbor. "No hay nadie más que se beneficie más de esto que las familias hipotecadas y dentro de éstas las más humildes", concluyó.