LD (Europa Press) Los ministros de Economía de la Unión Europea alcanzaron hoy sendos acuerdos políticos, pendientes de ratificar por el Parlamento Europeo, sobre dos normas cuyo objetivo es reforzar los requisitos de solvencia de los bancos y de las aseguradoras.
La ministra francesa de Finanzas y presidenta de turno del Ecofin, Christine Lagarde, dijo que la crisis financiera ha jugado un papel de "acelerador" para llegar a un acuerdo sobre estas normas en un tiempo récord. Las normas aprobadas "permiten reforzar la estabilidad y la solidez del sector financiero europeo", dijo Lagarde.
La primera norma aprobada por el Ecofin se refiere a los requisitos de capital para los bancos. Su principal novedad es que trata de restringir las inversiones de los bancos comunitarios en productos de alto riesgo y evitar así que se repita el 'efecto contagio' que han provocado los activos tóxicos que tienen su origen en las hipotecas de alto riesgo estadounidenses.
Para ello, la norma prohibirá a los bancos de la UE invertir en instrumentos con riesgo transferible, como titulizaciones de créditos, a menos que la entidad que les haya vendido este tipo de producto conserve al menos el 5% como medida de seguridad. De este modo se garantiza que el creador de estos productos esté expuesto a los mismos riesgos que los bancos que los compran y así no se atreva a vender activos tóxicos porque en última instancia él también resultaría perjudicado.
Además, se limitará también la cantidad de dinero que los bancos pueden prestarse entre sí en el mercado interbancario. La exposición de un banco a otra entidad no podrá superar en ningún caso el 25% de sus fondos propios o bien un límite de 150 millones de euros. Bruselas cree que esta medida no agravará las crisis de liquidez sino que por el contrario garantizará que los bancos "no pongan todos los huevos en la misma cesta".
Finalmente, se crearán "colegios de supervisores" para controlar a los grupos bancarios que tengan actividades en más de un Estado miembro. Estos colegios reunirán a las autoridades de control de los diferentes países en los que esté presente la entidad paneuropea.
El Ecofin dio también luz verde a un nuevo marco regulador para las aseguradoras que refuerza los requisitos de capital en la provisión de riesgos. La Comisión había propuesto un cambio en el modelo de supervisión que daba la última palabra al país donde se sitúa la matriz del grupo en lugar del país donde se encuentra la filial con problemas, como sucede ahora.
Sin embargo, una mayoría de Estados miembros liderados por España ha bloqueado los cambios en materia de supervisión por considerar que la autoridad del país de la matriz sería la que tomara las decisiones pero en caso de dificultades sería la autoridad de destino la que tendría que hacer frente a la financiación y a los problemas. Finalmente, la presidencia francesa ha decidido suprimir este capítulo de la norma sobre aseguradoras para que los nuevos requisitos en materia de solvencia puedan salir adelante.
Pasaporte para gestores de fondos
Los 27 aprobaron por último una norma para facilitar la comercialización transfronteriza de los fondos de inversión armonizados. La principal novedad de esta iniciativa es la creación de un 'pasaporte europeo' para las sociedades de gestión, que permitirá a los gestores gestionar fondos a distancia o a través de una sucursal con una autorización única.
La nueva norma tiene como objetivo facilitar las fusiones transfronterizas de este tipo de fondos y mejorar la información de los inversores a través de un documento que incluya toda una serie de datos clave. Finalmente, se precisan mejor las competencias respectivas y las modalidades de cooperación de las autoridades de supervisión. La Comisión sostiene que estas mejoras supondrán un beneficio de 6.000 millones de euros para la industria.
Estímulo fiscal de 1,5% del PIB
Además, los ministros de Economía han respaldado la propuesta de la Comisión Europea de poner en marcha un plan de estímulo fiscal equivalente al 1,5% del PIB comunitario (200.000 millones de euros) para sostener la demanda y combatir a la recesión. Sin embargo, los Veintisiete no se pusieron de acuerdo sobre los métodos para llevar a la práctica esta iniciativa.
"Hemos acordado que la cifra del 1,5% es necesaria para lanzar este plan de recuperación. También hemos acordado que el plan debe incluir una mezcla de medidas nacionales y de medidas financiadas por la UE que asciendan al 1,2% y al 0,3% respectivamente", dijo la ministra francesa de Finanzas, Christine Lagarde, en rueda de prensa al término de la reunión.
El primer punto de descuerdo fue sobre si para llevar a cabo este plan es o no necesario rebajar el tipo de IVA normal, siguiendo el ejemplo de Reino Unido, que lo ha reducido del 17,5% al 15% para estimular el consumo. El resto de países de la UE se desmarcaron de la iniciativa británica, que también aparecía en el plan de recuperación de la Comisión, y anunciaron que no reducirán el IVA.
Tampoco hubo acuerdo para aplicar de manera generalizada un tipo de IVA reducido a los servicios que requieren mucha mano de obra, como peluquerías o servicios de albañilería. Francia patrocina esta iniciativa y considera que podría tener un impacto positivo sobre la situación económica. Bruselas también la ha incluido en su plan de recuperación. Pero Alemania mantuvo su veto e impidió el acuerdo. París quiere que la cuestión vuelva a ser discutida en la cumbre de líderes europeos que se celebrará los días 11 y 12 de diciembre en Bruselas.
Además, algunos Estados miembros se opusieron a la propuesta de la Comisión de "utilizar mejor los recursos que no se han gastado del presupuesto europeo para reforzar las posibilidades de inversión en infraestructuras, energía, transportes o redes de telecomunicaciones". "Desgraciadamente, no hemos podido obtener del Ecofin el apoyo al grado de flexibilidad necesario para acelerar las inversiones gracias a la posibilidad de utilizar los recursos que no se han gastado en otras partidas", explicó el comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia.
El vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, dijo que España ya ha puesto en práctica medidas de impulso fiscal antes del plan de Bruselas y además esta semana se aprobará el decreto ley que moviliza otros 11.000 millones de euros, cifra que representa otro 1% del PIB.
"En la medida en que va dirigido básicamente a llevar a cabo obras por un periodo temporal del año 2009, especialmente en Ayuntamientos, cumpliremos los requisitos de llevar a cabo un esfuerzo fiscal extraordinario, durante un periodo de tiempo limitado, y que no tenga un carácter recurrente", señaló.
El plan de recuperación propuesto por la Comisión volverá a ser examinado por los jefes de Estado y de Gobierno de la UE en la cumbre del 11 y 12 de diciembre.