Esta actualización de las previsiones de IATA supone un descenso de 500 millones de dólares con respecto a los datos publicados en diciembre. Además, sitúa los márgenes de la industria en el 1,4%, ya que las compañías esperan ingresar 594.000 millones, informa Servimedia.
La IATA argumenta el cambio en las previsiones en el hecho de que los conflictos en los países árabes han elevado por encima de los 100 dólares el precio del barril de petróleo, cuando en diciembre el coste estimado se situaba en 84 dólares. Ahora sitúa el coste medio anual del carburante en 96 dólares por barril, lo que supondrá un incremento del gasto en fuel de 10.000 millones de dólares, alcanzando los 166.000 millones.
De esta manera, si se cumplen las nuevas previsiones de IATA, las aerolíneas gastarán un 20% más en carburante, partida que pasará a representar el 29% de sus costes, frente al 26% en 2010. Por ello, prevé que las compañías puedan traspasar a sus tarifas parte del incremento del precio del carburante, aunque no en su totalidad. Esto conllevará un incremento del precio de los billetes máximo de ese 20%.