El paro desciende entre los varones (15.700 parados menos), pero aumenta entre las mujeres (48.500 más). La tasa de paro de los hombres es del 19,72%, lo que supone 24 centésimas menos que en el primer trimestre de 2010. La de las mujeres sube cuatro décimas y se sitúa en el 20,56%.
Quizás, el único aspecto positivo es que sube algo el número de ocupados (las personas con algún tipo de trabajo) respecto al trimestre anterior: en 82.700 personas. Este incremento de la ocupación no ha podido absorber a todos los nuevos activos (los que se incorporan al mercado laboral), por lo que ha crecido la tasa de paro.
El desempleo crece en 58.800 personas entre los españoles y disminuye en 26.000 entre los extranjeros. La tasa de paro de los españoles es del 18,19% (18 centésimas más que en el trimestre anterior) y la de los extranjeros del 30,24% (55 centésimas menos que hace tres meses).
La tasa de paro del 20,09% alcanzada al cierre del segundo trimestre es cuatro centésimas superior a la del trimestre anterior y contrasta con la tasa del 17,9% existente un año atrás. Con esta cifra, la tasa de desempleo alcanza su nivel más alto de la serie histórica comparable, que arranca en 2001.
Remontándose más atrás, utilizando series no comparables, no se alcanzaba un porcentaje de esta naturaleza desde el cuarto trimestre de 1997, cuando la tasa de paro llegó a situarse en el 20,11%. El número de parados, por su parte, también supone una cifra récord para la economía española.
En el último año, el número de parados se ha incrementado en 508.000 personas, lo que en términos relativos implica un crecimiento del 12,3%, mientras que los empleos destruidos en este periodo suman 468.100 (-2,47%).
Además, el número de hogares con todos sus miembros activos en paro aumenta en 9.800 respecto al trimestre anterior y en 190.000 en los 12 últimos meses. El número total de hogares en esta situación es de 1.308.300.
Finalmente, el número de parados de larga duración se incrementó en el trimestre en 129.100 personas, un 7,7% más.