El impulso a las energías verdes tiene un elevado coste para el bolsillo de los contribuyentes. Tal y como explica Miguel Ángel Patiño en el diario Expansión, la fiesta de las renovables cuesta a cada español unos 300 euros de media.
El problema es que las tarifas eléctricas que pagan los usuarios están por debajo de lo que cuesta generar y distribuir la luz. No obstante, el sistema acumula un déficit de tarifa próximo a los 14.000 millones de euros que, poco a poco, el Gobierno trata de cubrir con leves pero constantes recargos en la factura de la luz.
El culpable de dicho déficit son las energías renovables que tanto alaba el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Y es que, la electricidad que generan las renovables supera en gran medida el coste de la producción eléctrica con otras tecnologías más eficientes y baratas, como por ejemplo la nuclear.
La generación de energía renovable recibe cuantiosas primas por parte del Ejecutivo. Así, entre 2004 y 2008, el sector ha recibido 9.875 millones de euros en primas. Una media de 246 euros por ciudadano.
Sin embargo, como cada vez hay más renovables (en ese periodo se han más que duplicado, hasta los 21.900 megavatios actuales), la factura verde cada vez es mayor. Tan sólo en lo que va de 2009, las primas ya han superado los 3.000 millones. Es decir, entre 2004 y lo que va de 2009 las primas a las renovables ascienden ya a 12.900 millones de euros, lo que supone un desembolso medio de más de 300 euros por ciudadano.
La cuantiosa rentabilidad que ofrecen estas primas a la generación de energía renovable ha provocado en España una burbuja verde que, sin embargo, ya está estallando. No obstante, el Gobierno está estudiando una nueva regulación del sector que reduce primas y cupos para frenar la especulación registrada en los últimos años.
Industria baraja un nuevo plan de renovables para alcanzar 58.000 megavatios de esta fuente energética en 2020. Sin embargo, los proyectos excedentes, que superen el 100% de los objetivos marcados por el Gobierno, ya no recibirán primas sino que se remunerará a precios de mercado.