(Libertad Digital) La crisis de la economía real y la del sistema financiero internacional (debida a las hipotecas subprime) están provocando un aumento de la morosidad y una caída en el ritmo de crecimiento de los préstamos hipotecarios, que se habían disparado en los últimos años. Los bancos no tienen dinero para dar más préstamos y los hipotecados están ahogados por la subida del Euribor, el IPC y el paro.
Según los datos del Banco de España, recogidos por Europa Press, la morosidad de los créditos concedidos por bancos, cajas de ahorro y cooperativas de crédito a particulares y empresas subió en agosto hasta el 2,44 por ciento. Este dato supone un incremento de 0,29 puntos respecto a la tasa de julio, cuando se situó en el 2,15 por ciento, y es más de tres veces superior a la de agosto de 2007 (+1,68 puntos), que se situaba en el 0,76 por ciento.
Además, el saldo de créditos dudosos aumentó en más de 5.300 millones de euros respecto al mes de julio, hasta situarse en 43.693 millones de euros en agosto frente a los 38.374 millones que suponían el mes anterior. El volumen total de préstamos concedidos hasta agosto alcanzó 1,78 billones de euros.
El dato no recoge la morosidad de los establecimientos financieros de crédito, ya que son entidades que pueden conceder créditos pero no captar depósitos y tienen una morosidad muy elevada. En concreto, en agosto se situó en el 4,185 por ciento
Martinsa-Fadesa, el paro y el Euríbor, principales causas
Este incremento de la morosidad, la decimocuarta subida consecutiva, estuvo impulsado por el concurso voluntario de acreedores (antigua suspensión de pagos) de Martinsa-Fadesa, que tuvo lugar a finales de julio, ya que la compañía acumula una deuda de unos 5.200 millones de euros con entidades como Caja Madrid, La Caixa, Banco Popular, Caixa Catalunya y Caixa Galicia, entre otras.
Además, según los expertos, el aumento del paro y los altos precios de la vivienda, unidos al actual nivel del Euríbor, índice de referencia de la mayoría de las hipotecas en España, también ha contribuido al incremento de la tasa de impago.
El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, indicó recientemente que uno de los principales retos a los que se enfrentan las entidades en el actual escenario es el aumento de la morosidad. Según el presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorro, Juan Ramón Quintás, la tasa de morosidad podría alcanzar el 3,3 por ciento al cierre de 2008 e incluso llegar al 5 por ciento en 2009.
Las cajas, principales responsables
Las cajas fueron las principales responsables del incremento de la morosidad en agosto, ya que el saldo dudoso de estas entidades aumentó tan sólo en un mes en 3.178 millones de euros (el 60 por ciento del total del crédito que pasó a ser dudoso en agosto) y en un año acumula un crecimiento de 19.254 millones de euros.
En concreto, los préstamos dudosos de las cajas alcanzaban en agosto los 25.467 millones de euros, con lo que la tasa de mora de estas entidades se situó en el 2,908 por ciento, casi cuatro veces por encima del nivel del 0,771 por ciento en el que se situaba en el mismo mes del año anterior. De este modo, la morosidad de las cajas se sitúa en el nivel más alto desde noviembre de 1997, cuando la tasa alcanzó el 3 por ciento.
La morosidad de los bancos también se encuentra en máximos históricos ya que cerró agosto en el 1,992 por ciento, un nivel que no registraba desde febrero de 1998, cuando suponía el 2,10 por ciento del total de créditos.