LD (Agencias) Al igual que sucede con las economías de EEUU y de Japón, la española "da signos de recesión", según ha señalado este lunes el secretario general de la Asociación Europea de Capital Riesgo (EVCA), Javier Echarri.
En su opinión, para afrontar la ralentización en España, y ante la posibilidad de que el parón inmobiliario se traduzca en una mayor concentración de empresas, el capital riesgo ha puesto sus ojos en las empresas de servicios complementarios a la construcción.
Por su parte, el presidente de la Asociación Española de Entidades de Capital Riesgo (ASCRI), Jaime Hernández Soto, ha señalado que "estamos mirando este sector porque ha habido una industria tremendamente dinámica y toca entender cómo va a afrontar sus problemas". En este sentido, el capital riesgo no ve estas posibilidades de negocio en el sector inmobiliario, por lo que serán a los fondos especializados en esta actividad quienes tendrán que "lidiar con las inmobiliarias" durante el reajuste del mercado.
Tanto Hernández Soto como Javier Echarri han coincidido en que el capital riego está padeciendo las consecuencias de las restricciones de liquidez que sufren los mercados financieros, derivadas de la crisis de las hipotecas "subprime" desatada en EEUU. Por esta razón, prevén un menor número de grandes operaciones, lo que supondría un descenso del volumen inversor en este ejercicio que podría situarse en torno al 20 por ciento en España y alrededor del 30 por ciento en Europa.
En su opinión, de producirse este ajuste, los recursos invertidos en España podrían pasar de los más de 4.330 millones de euros de 2007 a 3.460 millones en 2008, mientras que en Europa, el volumen inversor bajará de 71.000 millones a 49.700 millones. Sin embargo, tanto la patronal española como la europea ven con optimismo estos escenarios de dificultad y señalan que el capital riesgo opera a medio y largo plazo y puede registrar sus mejores resultados.
A la espera de un ajuste de precios
Ambos especialistas prevén que se produzca un ajuste paulatino de precios que, poco a poco, podría prolongarse hasta mediados del año próximo y que permitirá al capital riesgo realizar nuevas inversiones con buenas posibilidades de rentabilidad. Echarri ha señalado que el capital riesgo ve precios demasiado elevados en la actualidad y no está dispuesto a pagar de media entre cinco y cuatro veces el resultado bruto de explotación (Ebitda) por una empresa. En su opinión, "hace falta una adecuación de los precios".
Por su parte, Hernández Soto ha dicho que "siempre que hay un reajuste de precios se tarda en digerir", por lo que confía en que el capital riesgo recupere la normalidad a medio plazo, aunque se registren cambios respecto a los últimos años. En concreto, ha explicado que el precio de permanencia del capital riesgo en las empresas adquiridas últimamente se había acortado hasta los dos años, y ha pronosticado que el plazo volverá a situarse en torno a los cinco años.
El presidente de la patronal española ha recalcado que "será un poco más complicado que los últimos diez años que nos ha tocado vivir". Acto seguido, ha dicho que España cuenta con uno de los marcos legislativos (Ley 25/2005) más favorables para la inversión en capital riesgo.