LD (Agencias) Según los últimos datos del Banco de España, los préstamos a largo plazo siguieron siendo la principal carga de los hogares españoles, ya que sumaban más de 850.027 millones y en el último año han crecido en 81.057 millones de euros, es decir, un 10,54 por ciento más. Frente a este incremento, los préstamos a corto plazo aumentaron más de 2.500 millones de euros, mientras que las cuentas pendientes de pago se redujeron cerca de 2.400 millones.
Al mimo tiempo, la riqueza financiera de las familias, los activos que están en manos de los hogares (efectivo, acciones, fondos, seguros, etc.), han caído a niveles de septiembre de 2006. Estos activos sumaban al término del primer trimestre 1,80 billones de euros, 64.331 millones de euros menos que en el mismo periodo de 2007.
Las mayores pérdidas dentro de los activos financieros, si se compara el primer trimestre del año con el mismo periodo de 2007, se las anotaron las acciones cotizadas y las no cotizadas, cuyo volumen se redujo un 20,89 y un 21,05 por ciento, respectivamente.
Por su parte, los mayores incrementos fueron para "otros depósitos" y para los valores a largo plazo, que crecieron en términos interanuales un 23,59 y un 18,25 por ciento. Así, el dinero en efectivo y los depósitos continuaron siendo la principal partida del activo, con 746.091 millones de euros y un incremento en los últimos doce meses del 9,34 por ciento.
A partir de estos datos, la riqueza neta de las familias (los activos menos los pasivos) alcanzó a cierre de marzo 859.296 millones de euros, lo que supone 145.540 millones menos que un año antes y una caída hasta niveles de finales de 2005.A continuación se muestran en una tabla las principales partidas que componen la cuenta financiera de las familias, en millones de euros, al cierre del primer trimestre de 2008 y de 2007.
El 46,1 por ciento para vivienda
Las familias españolas que adquirieron una vivienda en el segundo trimestre del año destinaron a esa compra el 46,1 de su renta bruta anual disponible, una décima menos que en el trimestre anterior, cuando esta tasa se situó en el 37,2 por ciento. Una vez descontadas las deducciones fiscales, este esfuerzo se sitúa en el 37,1 por ciento.
De acuerdo con los últimos datos del Banco de España, el esfuerzo económico de quienes compraron una vivienda entre abril y junio de 2008 fue 1,4 puntos mayor que el realizado por quienes la adquirieron un año antes. No obstante, dicho esfuerzo está disminuyendo ligeramente, a razón de una décima por trimestre, desde que a finales de 2007 se situara en el 37,3 por ciento, la tasa más alta registrada desde que en 1995 el Banco de España comenzó a elaborar esta estadística.
De esta forma, durante el segundo trimestre del año el precio de una vivienda libre de 93,75 metros cuadrados construidos (base sobre la que el Banco de España elabora sus cálculos) era 6,9 veces la renta bruta anual disponible de un hogar mediano. Tres meses antes las familias necesitaban la renta de 7 años para pagar el importe de un inmueble, pero la caída del 0,3 por ciento del precio de la vivienda libre en el segundo semestre del año ha propiciado que este ratio descienda ligeramente.
Según el Ministerio de Vivienda, el coste medio del metro cuadrado era en junio de 2.096 euros, con lo que cada familia necesitó 196.500 euros para comprar una vivienda tipo de 93,75 metros cuadrados. Según la legislación vigente, los contribuyentes pueden desgravarse el 15 por ciento por sus aportaciones anuales, con un límite máximo de 9.015,18 euros.