El Indicador de Confianza del Consumidor que elabora el Instituto de Crédito Oficial (ICO), que había registrado un repunte en enero, cayó 7,6 puntos, hasta 71,1, debido sobre todo al desplome del indicador de percepción de la situación económica actual.
También ha retrocedido en gran medida la confianza en la situación actual de la economía doméstica y del empleo, y, en menor grado, las expectativas de futuro que sobre ambas cuestiones tienen los ciudadanos.
El ICO considera que, pese al retroceso mensual, los "movimientos laterales" del indicador parecen "propios de un momento de inicio de la recuperación económica".
Pese al retroceso registrado en un mes, la confianza de los consumidores ha aumentado 22,5 puntos en el último año, ya que en febrero de 2009 se situaba sólo en los 48,6 puntos.
Según el ICO, la idea que los ciudadanos tienen de la economía española es lo que más ha pesado en la caída de su confianza.
Dicha percepción ha retrocedido 11,6 puntos en lo que a la situación actual de la economía se refiere, y 8,9 puntos en cuanto a las expectativas. Mientras, la percepción sobre la economía familiar ha empeorado en 4,8 puntos y han retrocedido 6,5 puntos las expectativas de futuro.
También ha empeorado la impresión sobre el empleo: 7,2 puntos inferior a la de enero en cuanto a la situación actual y 6,2 puntos por debajo en cuanto a las expectativas.
Por otro lado, las expectativas de los consumidores sobre inflación y subida de tipos de interés disminuyeron en febrero con respecto al mes anterior, y los encuestados también se han mostrado más pesimistas sobre sus posibilidades de ahorro y de compra de bienes de consumo duradero.
Pese a este empeoramiento, también en el último año han mejorado las expectativas de los consumidores sobre estas cuatro cuestiones.