LD (EFE) La bolsa comenzó la sesión con una caída del 1 por ciento y se situó por debajo de 9.300 puntos afectada por la caída del 0,6 por ciento de Wall Street ayer después de que el último informe de la Reserva Federal -banco central- rebajara las previsiones de crecimiento estadounidenses.
Con el empeoramiento de la perspectiva de la deuda británica por Standard and Poor's y el retroceso de las plazas europeas la bolsa llegaba a perder el nivel de 9.200 puntos con una bajada superior al 2 por ciento.
La mejora de las ventas minoristas en el Reino Unido el 0,9 por ciento en abril o de la actividad en el sector servicios en la zona euro en mayo, según datos adelantados, servían para contener la caída y recuperar la cota de 9.200 puntos.
Las declaraciones del ex presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan sobre las necesidades de capital de los bancos estadounidense y la necesaria estabilización de los precios de la vivienda para que crezca la economía, unido a los datos de peticiones semanales de subsidios de desempleo estadounidenses, volvieron a acercar a la bolsa a 9.200 puntos.
Aunque las estadísticas de ayudas a los parados cayeron en 12.000, hasta 631.000, fueron mal acogidas por el mercado y Wall Street abrió con un retroceso superior al 1 por ciento.
Con el empeoramiento de la actividad industrial en mayo en el oriente de EEUU, el mercado neoyorquino agrandaba sus pérdidas a pesar de la subida de los indicadores adelantados estadounidenses en abril el 1 por ciento, por primera vez en siete meses.
Al final del día, con el petróleo alrededor de 59 dólares , la bolsa conseguía recuperar el nivel de 9.200 puntos.
Caen los pesos pesados
Todos los grandes valores bajaron: BBVA, el 2,76 por ciento; Banco Santander, el 2,46 por ciento; Repsol, el 2,1 por ciento; Iberdrola, el 1,96 por ciento, y Telefónica, el 0,07 por ciento.
ArcelorMittal comandó las pérdidas del Ibex y de la bolsa española con una caída del 7,76 por ciento afectada por la rebaja de su calificación crediticia, seguida de Sacyr, que bajó el 4,29 por ciento, mientras que Ferrovial cayó el 3,67 por ciento; Telecinco, el 3,42 por ciento e Iberia, el 3,01 por ciento.
Sólo cuatro compañías del Ibex concluyeron la sesión con ganancias , que presidió Grifols al subir el 1,14 por ciento, en tanto que Red Eléctrica avanzó el 0,96 por ciento tras conocerse que Unión Fenosa había vendido el 1 por ciento de su capital; Cintra, el 0,88 por ciento, e Iberdrola Renovables, el 0,87 por ciento.
En el mercado continuo , tras ArcelorMittal sobresalió la bajada de los derechos de la ampliación de Bankinter, el 6,78 por ciento, en tanto que Ynipsa lideró las ganancias con un alza del 11,79 por ciento tras anunciar una ampliación de capital gratuita en la proporción de una acción nueva por cada 18 antiguas.
La rentabilidad de la deuda española a largo plazo subía tres centésimas, hasta el 4,13 por ciento, en tanto que el efectivo negociado en el mercado continuo se situó en 2.334 millones, de los que algo más de 600 correspondieron a operaciones efectuadas por inversores institucionales
Con el empeoramiento de la perspectiva de la deuda británica por Standard and Poor's y el retroceso de las plazas europeas la bolsa llegaba a perder el nivel de 9.200 puntos con una bajada superior al 2 por ciento.
La mejora de las ventas minoristas en el Reino Unido el 0,9 por ciento en abril o de la actividad en el sector servicios en la zona euro en mayo, según datos adelantados, servían para contener la caída y recuperar la cota de 9.200 puntos.
Las declaraciones del ex presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan sobre las necesidades de capital de los bancos estadounidense y la necesaria estabilización de los precios de la vivienda para que crezca la economía, unido a los datos de peticiones semanales de subsidios de desempleo estadounidenses, volvieron a acercar a la bolsa a 9.200 puntos.
Aunque las estadísticas de ayudas a los parados cayeron en 12.000, hasta 631.000, fueron mal acogidas por el mercado y Wall Street abrió con un retroceso superior al 1 por ciento.
Con el empeoramiento de la actividad industrial en mayo en el oriente de EEUU, el mercado neoyorquino agrandaba sus pérdidas a pesar de la subida de los indicadores adelantados estadounidenses en abril el 1 por ciento, por primera vez en siete meses.
Al final del día, con el petróleo alrededor de 59 dólares , la bolsa conseguía recuperar el nivel de 9.200 puntos.
Caen los pesos pesados
Todos los grandes valores bajaron: BBVA, el 2,76 por ciento; Banco Santander, el 2,46 por ciento; Repsol, el 2,1 por ciento; Iberdrola, el 1,96 por ciento, y Telefónica, el 0,07 por ciento.
ArcelorMittal comandó las pérdidas del Ibex y de la bolsa española con una caída del 7,76 por ciento afectada por la rebaja de su calificación crediticia, seguida de Sacyr, que bajó el 4,29 por ciento, mientras que Ferrovial cayó el 3,67 por ciento; Telecinco, el 3,42 por ciento e Iberia, el 3,01 por ciento.
Sólo cuatro compañías del Ibex concluyeron la sesión con ganancias , que presidió Grifols al subir el 1,14 por ciento, en tanto que Red Eléctrica avanzó el 0,96 por ciento tras conocerse que Unión Fenosa había vendido el 1 por ciento de su capital; Cintra, el 0,88 por ciento, e Iberdrola Renovables, el 0,87 por ciento.
En el mercado continuo , tras ArcelorMittal sobresalió la bajada de los derechos de la ampliación de Bankinter, el 6,78 por ciento, en tanto que Ynipsa lideró las ganancias con un alza del 11,79 por ciento tras anunciar una ampliación de capital gratuita en la proporción de una acción nueva por cada 18 antiguas.
La rentabilidad de la deuda española a largo plazo subía tres centésimas, hasta el 4,13 por ciento, en tanto que el efectivo negociado en el mercado continuo se situó en 2.334 millones, de los que algo más de 600 correspondieron a operaciones efectuadas por inversores institucionales