LD (EFE) El 19,5 por ciento de los créditos concedidos por la banca europea en esa zona proceden de sociedades austríacas, consideradas como "pioneras" por su fuerte presencia en estos mercados.
Con un volumen de 228.000 millones de euros, los préstamos de entidades como el Bank Austria (forma parte del italiano Unicredit), Raiffeisen o Erste Bank, suman el 68 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la república alpina.
Los bancos de la pequeña Austria superan incluso a las entidades alemanas, italianas y francesas, cuyos porcentajes de créditos concedidos en esa región se sitúan sólo entre el 11 y 16 por ciento del total. Según indicó el Banco Nacional de Austria (OeNB) el año pasado, un 43 por ciento de los beneficios de la banca austríaca proceden de los países ex comunistas de Europa del Este.
Con un volumen de 228.000 millones de euros, los préstamos de entidades como el Bank Austria (forma parte del italiano Unicredit), Raiffeisen o Erste Bank, suman el 68 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la república alpina.
Los bancos de la pequeña Austria superan incluso a las entidades alemanas, italianas y francesas, cuyos porcentajes de créditos concedidos en esa región se sitúan sólo entre el 11 y 16 por ciento del total. Según indicó el Banco Nacional de Austria (OeNB) el año pasado, un 43 por ciento de los beneficios de la banca austríaca proceden de los países ex comunistas de Europa del Este.
Elevada exposición
El banco más expuesto es el Raiffeisen, con un 50 por ciento de sus activos y un 80 por ciento de sus beneficios en Europa del Este, mientras que el Erste Bank tiene un 35 por ciento de sus activos en esos países, donde genera un 53 por ciento de sus beneficios.
Lo que más preocupa a los banqueros austríacos es que en los países ex comunistas el hogar deudor medio invierte un 30 por ciento de sus ingresos para devolver su crédito, frente al 10 por ciento en el la zona euro.
El banco más expuesto es el Raiffeisen, con un 50 por ciento de sus activos y un 80 por ciento de sus beneficios en Europa del Este, mientras que el Erste Bank tiene un 35 por ciento de sus activos en esos países, donde genera un 53 por ciento de sus beneficios.
Lo que más preocupa a los banqueros austríacos es que en los países ex comunistas el hogar deudor medio invierte un 30 por ciento de sus ingresos para devolver su crédito, frente al 10 por ciento en el la zona euro.
Muchos préstamos no podrán ser devueltos
Ese dato y la fuerte devaluación de varias monedas, como el leu rumano, el forinto húngaro o la grivna ucraniana, hacen temer que muchos préstamos en euros no podrán ser devueltos. Ante esta situación, el director general del Bank Austria, Erich Hampel, pidió esta semana en Viena un paquete internacional de rescate para la banca en Europa del Este.
Ese paquete, valorado en unos 400.000 millones de euros, debería evitar un derrumbe del sistema financiero en la región, hasta ahora la más dinámica de Europa. "Sabemos que los riesgos están creciendo", reconoció Hampel durante una conferencia regional de banqueros.
En Viena se rechaza que la región sea tratada como un bloque monolítico y se destaca que en varios países el crecimiento se mantendrá este año, como por ejemplo Rusia, Rumanía y Eslovaquia. Pero según un reciente informe del Banco Europeo para Reconstrucción y Desarrollo (BERD), otras economías, con Ucrania al frente, también caerán en una recesión este año.
Ese dato y la fuerte devaluación de varias monedas, como el leu rumano, el forinto húngaro o la grivna ucraniana, hacen temer que muchos préstamos en euros no podrán ser devueltos. Ante esta situación, el director general del Bank Austria, Erich Hampel, pidió esta semana en Viena un paquete internacional de rescate para la banca en Europa del Este.
Ese paquete, valorado en unos 400.000 millones de euros, debería evitar un derrumbe del sistema financiero en la región, hasta ahora la más dinámica de Europa. "Sabemos que los riesgos están creciendo", reconoció Hampel durante una conferencia regional de banqueros.
En Viena se rechaza que la región sea tratada como un bloque monolítico y se destaca que en varios países el crecimiento se mantendrá este año, como por ejemplo Rusia, Rumanía y Eslovaquia. Pero según un reciente informe del Banco Europeo para Reconstrucción y Desarrollo (BERD), otras economías, con Ucrania al frente, también caerán en una recesión este año.
La crisis golpea a los emergentes
Incluso aquellos países que se mantienen en márgenes positivo, están lejos de las tasas de crecimiento superior al 7 por ciento a las que se habían acostumbrado en los últimos años y que fueron la base del éxito de Austria, que se beneficio como ningún otro de las reformas y del "boom" económico en Europa de Este.
El BERD destaca que el ambiente internacional ha empeorado tanto en las últimas semanas en los países industrializados, que una posible retirada de capitales y la falta de inversión extranjera pondrán a prueba la resistencia económica de Europa del Este . Por ahora, los bancos austríacos prometen que harán todo lo posible para no sofocar el mercado de créditos en Europa del Este.
"Vamos a hacer todo los posible para evitar una escasez de préstamos", dijo Hampel y aseguró que todas las filiales regionales de Unicredit seguirán recibiendo los fondos necesarios.