LD (EFE) Fuentes de Iberdrola informaron que Galán se reunió hoy en la sede de la eléctrica con el presidente de ACS que ayer solicitó el encuentro.
La entrevista entre ambos empresarios se produce después de que ACS enviara un requerimiento notarial a Iberdrola para reclamar un puesto en el Consejo de Administración de la eléctrica, de la que posee el 7,2 por ciento del capital directamente y un 5,1 por ciento adicional a través de derivados.
En el encuentro, Pérez reiteró a Galán la intención de ACS de contar con un puesto en el órgano de dirección de la energética, según la misma fuente, que apuntó que la reunión se desarrolló en "un marco de cordialidad y normalidad institucional".
Apuntó que la reunión se enmarca dentro de los contactos habituales que Galán mantiene con los accionistas relevantes de la compañía.
Por ello, entre otros asuntos, Galán expuso al presidente de ACS las cuentas de la eléctrica correspondientes a 2008 y el orden del día de la Junta General de Accionistas, que previsiblemente se celebrará el 20 de marzo.
En reiteradas ocasiones, Pérez ha expresado el interés de su grupo por aumentar su presencia en Iberdrola, así como por lograr un puesto en su Consejo.
Hasta ahora, la constructora tenía vetada la entrada en el órgano de gobierno de Iberdrola porque estaba presente en el consejo de un competidor, Unión Fenosa, obstáculo que habría desapareció el pasado 4 de marzo.
Ese día, el presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró, sustituyó a Pedro López Jiménez en la presidencia de Unión Fenosa, cuyo C onsejo de Administración aprobó la salida de los nueve representantes de la constructora ACS y la entrada de tres consejeros de la gasista.
La remodelación del Consejo de Administración de Unión Fenosa se produjo después de que Gas Natural cerrase el 2 de marzo la compra a la constructora ACS del 35,32 por ciento que poseía en la eléctrica.
No obstante, Iberdrola reenvió recientemente un documento a la CNMV en el que se recuerda que cualquier compañía que quiera poseer el 10 por ciento de su capital tendrá que tener el visto bueno al menos de cuatro supervisores estadounidenses, ya que es propietaria de Energy East.
La entrevista entre ambos empresarios se produce después de que ACS enviara un requerimiento notarial a Iberdrola para reclamar un puesto en el Consejo de Administración de la eléctrica, de la que posee el 7,2 por ciento del capital directamente y un 5,1 por ciento adicional a través de derivados.
En el encuentro, Pérez reiteró a Galán la intención de ACS de contar con un puesto en el órgano de dirección de la energética, según la misma fuente, que apuntó que la reunión se desarrolló en "un marco de cordialidad y normalidad institucional".
Apuntó que la reunión se enmarca dentro de los contactos habituales que Galán mantiene con los accionistas relevantes de la compañía.
Por ello, entre otros asuntos, Galán expuso al presidente de ACS las cuentas de la eléctrica correspondientes a 2008 y el orden del día de la Junta General de Accionistas, que previsiblemente se celebrará el 20 de marzo.
En reiteradas ocasiones, Pérez ha expresado el interés de su grupo por aumentar su presencia en Iberdrola, así como por lograr un puesto en su Consejo.
Hasta ahora, la constructora tenía vetada la entrada en el órgano de gobierno de Iberdrola porque estaba presente en el consejo de un competidor, Unión Fenosa, obstáculo que habría desapareció el pasado 4 de marzo.
Ese día, el presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró, sustituyó a Pedro López Jiménez en la presidencia de Unión Fenosa, cuyo C onsejo de Administración aprobó la salida de los nueve representantes de la constructora ACS y la entrada de tres consejeros de la gasista.
La remodelación del Consejo de Administración de Unión Fenosa se produjo después de que Gas Natural cerrase el 2 de marzo la compra a la constructora ACS del 35,32 por ciento que poseía en la eléctrica.
No obstante, Iberdrola reenvió recientemente un documento a la CNMV en el que se recuerda que cualquier compañía que quiera poseer el 10 por ciento de su capital tendrá que tener el visto bueno al menos de cuatro supervisores estadounidenses, ya que es propietaria de Energy East.