El pasado mayo, José Luis Rodríguez Zapatero presentó en el Congreso el tijeretazo, el mayor paquete de reducción del gasto público de la reciente historia de España, que incluía entre otras medidas la congelación del gasto de las pensiones. Sin embargo, este miércoles todos los pensionistas han recibido una carta de la Seguridad Social en la que se les anuncia la revalorización de sus pensiones.
En esta misiva, el director general del organismo, Fidel Ferreras Alonso, admite que el tijeretazo incluye "la suspensión para el año 2011 de la revalorización de las pensiones", aunque luego matiza que "dicha suspensión no afecta al mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones durante el ejercicio 2010". De esta manera, muchos jubilados españoles se preguntan qué ocurre y si van a tener o no un incremento en sus pensiones.
Lo cierto es que casi todo lo que rodea al sistema público de pensiones es algo complejo. De hecho, en este caso podría decirse que el Gobierno sube y congela las pensiones al mismo tiempo. ¿Cómo lo hace?
Los 3 ajustes de enero
Cada año, a finales de enero, los pensionistas reciben tres ajustes a su paga. Por eso es por lo que se da la situación actual en la que se mezclan una subida y una congelación.
Podría decirse que dos de estos incrementos, los que vienen de los Presupuestos de 2010, se mantienen. Mientras, el otro, el que se aprueba en los Presupuestos Generales del Estado de 2011, es el que se congela. Pero quizás lo más sencillo sea explicarlo ayudándonos de un ejemplo:
1. Paga extra por ajuste de la inflación de 2010: Se mantiene. Corresponde a la notificación que han recibido este jueves los pensionistas. El Gobierno aprobó en enero de 2010 una subida del 1% de las pensiones sobre lo cobrado en 2009, porque preveía que éste sería el incremento del IPC (Índice de Precios de Consumo). Sin embargo, los precios han subido un 2,3%. Por lo tanto hay que hacer el ajuste por el 1,3% de diferencia de los últimos doce meses.
Por ejemplo, si un pensionista cobró 1.000 euros al mes durante 2009, el Gobierno le debe un 1,3% de 1.000 euros = 13 euros por cada uno de los meses de 2010 en los que cobró mal la pensión. En este caso, la paga que habrá recibido este miércoles es de 13*14 = 182 euros.
2. Ajuste de pensión para 2011: Quizás éste sea el punto que más confundirá a los pensionistas. Después de decirles mil veces que no se les iba a subir la pensión, verán como sí tienen un ligero incremento en lo que reciben a partir de ahora. Esto es debido a que se consolida ese incremento del 2,3% del que hablábamos antes.
El pensionista del ejemplo ha cobrado a lo largo de 2010 una pensión de 1.010 euros. sin embargo, a partir de ahora, lo que recibirá en su cuenta cada mes tendrá un incremento del 2,3% respecto a los 1.000 euros que cobraba en 2009. 1.000*1,023 = 1.023 euros. Es decir, ganará 13 euros más en 2011 que en 2010.
3. Nuevo incremento en relación con el IPC de 2011: Éste es el concepto que se congela, de acuerdo con lo aprobado en el tijeretazo. Todos los años, los pensionistas veían como su pensión se revalorizaba en función de las previsiones del Gobierno sobre la evolución del IPC.
Por seguir con nuestro ejemplo, si el Gobierno cree que los precios subirán un 3% en 2011 (el último dato conocido), debería incrementar la paga mensual de nuestro pensionista en ese porcentaje. De este modo, cada mes recibiría una pensión de 1.023*1,03 = 1.053,69 euros.
Sin embargo, este año no hará ese cálculo. Todas las pensiones (salvo las más bajas) se congelan. Por lo tanto, el jubilado de nuestro ejemplo cobraría 1.023 euros. Es decir, perdería unos 30 euros de poder adquisitivo cada mes.
Las consecuencias
Este incremento automático fue establecido por primera vez por el Gobierno de Aznar en julio de 1997. Desde entonces, siempre se había mantenido esta figura, que permitía a los pensionistas españoles mantener su capacidad adquisitiva fuera cual fuera la evolución de los precios; puesto que si la inflación era mayor que la prevista, se ajustaba el diferencial con la paga de enero.
El problema para los pensionistas es que la congelación ha llegado justo cuando más alta está la inflación. Durante los dos años más duros de la crisis, el incremento de los precios se ha mantenido en el entorno del 1% (incluso, ha habido tasas negativas). Sin embargo, esta tendencia ha cambiado desde el otoño, en consonancia con el alza en las materias primas. Si el IPC sube un 3% en 2011, ésa será la pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas españoles. El Gobierno habla de "congelación", pero la realidad es que se perderá capacidad de compra (lo que se conoce como poder adquisitivo).
Enero de 2012
Evidentemente, la decisión de Zapatero tendrá su reflejo a lo largo de 2011, pero también en 2012. En enero del año que viene, los pensionistas no recibirán una paga extra de compensación como la que ha llegado a sus casas este miércoles. No hay previsión de IPC, por lo que no hay nada que compensar. Y tampoco habrá consolidación de la pensión (punto 2, ver arriba) para ajustar la nueva pensión a la inflación pasada.
Actualización: Tal y como comenta con precisión y amabilidad Arquiges, en el foro de esta noticia, el cálculo se hace sobre la prestación recibida en 2009. Hemos actualizado el ejemplo en el cuerpo de la noticia para aclarar la cuestión, aunque la explicación general sigue siendo válida.