No es la primera vez que los funcionarios de los Servicios Públicos de Empleo (antiguo INEM) ponen el grito en el cielo por la falta de compromiso del Ministerio de Trabajo y de las administraciones autonómicas y municipales a la hora de evitar el fraude en las ayudas públicas que cobran personas que, en teoría, no tienen trabajo, han agotado su prestación por desempleo y, en muchos casos, dicen tener personas a su cargo.
Hasta ahora, la estrategia del departamento ministerial que dirige Celestino Corbacho es ordenar a los funcionarios del INEM que acepten las solicitudes casi sin verificarlas: primero se paga y después, si se puede, se comprueba; como señalaba la ex ministra de Cultura, Carmen Calvo, cuando regalaba subvenciones a los artistas que apoyaban al Gobierno: "el dinero público no es de nadie".
Pero a esta campaña de ayudas masivas para evitar revueltas sociales (con casi cinco millones de desempleados y una tasa del paro que supera el 20%) se suma ahora la falta de capacidad del aparato burocrático para confirmar si las personas que reciben las ayudas tienen derecho a las mismas. Según denuncian funcionarios del INEM a Libertad Digital, el fraude es mucho mayor de lo que se podría pensar:
"Como no disponemos de capacidad técnica tanto el SPEE (INEM) como la Seguridad Social y las comunidades para cruzar bases de datos, porque cada uno va por libre y cada uno tiene una aplicación informática de su padre y de su madre, pues nos encontramos con perceptores avispados que lo cobran todo, rapiñando por todas partes, y otros que se quedan a la Luna de Valencia, como dice el aforismo popular".
Así de taxativas se muestran las fuentes consultadas, pero es que el escándalo es de una enorme magnitud. Veamos algunos ejemplos:
- Hay perceptores que cobran la Renta Activa de Inserción (RAI) al mismo tiempo que el Ingreso Mínimo de Inserción (IMI), que concede la asistencia social municipal o las diputaciones provinciales.
- Los hay que cobran los subsidios por desempleo y la RAI (ambas ayudas del INEM), y la procedente de los Itinerarios Activos de Empleo (IAE), que es un subsidio autonómico.
- Hay jóvenes que cobran subsidios del INEM y la Renta Básica de Emancipación (ayudas al alquiler) que conceden las comunidades autónomas o el Ministerio de la Vivienda.
Las fuentes consultadas señalan que hay muchos ejemplos más. "Se da el caso de que hay quienes lo perciben todo. Y todas estas ayudas son legalmente incompatibles, se percibe una cosa o la otra". Por ello, denuncian que "esto es un descontrol brutal, nunca conocido".
Y todo ello sin mencionar que el Gobierno ha decidido que sean los técnicos de Hacienda quienes se encarguen de perseguir este tipo de fraudes, especialmente en el caso de personas que trabajan sin declararlo (en negro) y cobran prestaciones. ¿Qué ocurrirá? "Que muchos desempleados, los menos avispados, se encontrarán -a poco que se descuiden- con cobros indebidos, que deberán devolver religiosamente sí o sí, bajo amenazas de embargo, y unas cuantas multas por fraudes a la Seguridad Social y al Fisco", explican en el INEM..