El Ministerio de Fomento suspenderá o retrasará hasta cuatro años la ejecución de unos 230 contratos de carreteras y ferrocarriles, el 20% del total de 1.166 actuaciones de más de un millón de euros actualmente en marcha, anunció este jueves el titular del departamento, José Blanco. Este recorte supone un importe de 9.626 millones de euros, lo que representa el 30% de los 33.000 millones a los que asciende toda la cartera de obras que el departamento tenía hasta ahora adjudicadas y pendientes de ejecución, José Blanco.
Del total de obras, 18 proyectos de este tipo de infraestructuras de transporte, el 2,7% del total en curso, se rescindirán, y otros 199 contratos (el 17%) sufrirán una demora en su ejecución de entre uno y cuatro años. Estos 18 proyectos suman un monto de 926 millones de euros, mientras que los 199 cuya ejecución se alargará entre uno y cuatro años suman un presupuesto de 8.700 millones más.
El ministro atribuyó esta reprogramación de obras al recorte de inversión de 6.400 millones de euros que sufrirá su Departamento en lo que queda de año y 2011 por las medidas 'antidéficit' aprobadas por el Gobierno, pero también a la necesidad de revisar bajo criterios de eficiencia la política construcción de nuevas dotaciones de transporte.
Durante su comparecencia en la Comisión de Fomento, Blanco explicó que del recorte se quedan fuera las obras de puertos y aeropuertos y afectará fundamentalmente a carreteras. Asimismo, aseguró que ha buscado limitar "al máximo" la rescisión de contratos, atendiendo a lo expuesto por las patronales del sector, "para reducir la afección a la cartera de las empresas".
Además, indicó que, pese al ajuste, 885 proyectos, el 80% del total de contratos de obra nueva de más de un millón de euros que actualmente ejecuta el Ministerio, "seguirán su curso sin ninguna alteración", y que se pondrán en marcha los primeros contratos en colaboración con la iniciativa privada del Plan Extraordinario.
"A ningún ministro de Fomento le resulta fácil decir que se van a rescindir contratos y que se van a ralentizar obras. Tampoco es lo más popular plantearse cerrar líneas de ferrocarril, pero tengo la absoluta determinación de salvar lo mejor posible la situación del presente, sino de garantizar un escenario de sostenibilidad a largo plazo en construcción y explotación de infraestructuras", explicó Blanco.