España contaba con 3.029.500 de empleados públicos en el primer trimestre de 2009, según la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE), un 10,4% más respecto al primer trimestre de 2004.
De esos algo más de 3 millones de funcionarios, el Ministerio de Administracines Públicas recoge información bastante exhaustiva sobre 2.693.267, que constituyen la base informativa de un reciente análisis elaborado por la patronal de las pymes catalanas (Pimec), en el que se detalla la evolución y distribución del empleo público, tanto a nivel nacional como regional.
El estudio Personal al Servicio de las Administraciones Públicas en el Estado español. 2004-2009 destaca que el funcionariado en España ha crecido un 20,6% en los últimos cinco años, un porcentaje muy superior al aumento registrado por el conjunto del empleo en el mismo período (8,5%).
Dicho informe refleja un "claro crecimiento" del empleo público, "en tasas superiores a las del conjunto de la economía" y constata que mientras éste "mantiene su tono de crecimiento" en 2009, "el privado experimenta una gran disminución".
En cifras totales (funcionarios y asalariados del sector público), el empleo público aumentó un 11,9% entre 2004 y 2009, a un ritmo medio del 2,3% anual, y por lo tanto muy superior al incremento del empleo en el sector privado, con lo que el peso de los trabajadores del sector público sobre el empleo total ha crecido hasta situarse en el 14,1% en 2009 en el conjunto de España.
En concreto, durante el periodo 2004-2009, el número de empleados en las administraciones públicas ha subido en 285.971 personas hasta situarse en 2.693.267, según datos oficiales del Gobierno (unos 336.000 menos que la cifra que refleja la EPA).
La administración estatal emplea a 575.021 personas, el 21,4% del total de empleados públicos en España. Las CCAA, por su parte, tienen en plantilla a 1.332.844 empleados (el 49,5% del total). Las CCAA registran el mayor número de trabajadores públicos. Mientras, la administración local emplea al 23,4%. A distancia de los anteriores, Universidades y Correos dan trabajo al 3,7% y al 2,1%, respectivamente.
Extremadura, líder en empleo público
Sin embargo, el peso del empleo público en el mercado laboral muestra importantes diferencias por comunidades autónomas. Así, el caso de Extremadura destaca por encima de todas, ya que el 23,3% del total de los trabajadores de la región pertenecen al sector público. Superando el 15% figuran Castilla y León, Castilla-La Mancha y Andalucía. Entre el 13% y 15% se sitúan Aragón, Canarias, Asturias y Madrid, mientras que Cataluña es la comunidad con menos empleados públicos respecto al conjunto del empleo regional (8,3%).
Otra variable a destacar es el ratio del empleo público en el conjunto de la población. Extremadura vuelva a liderar este índice, ya que cuenta con 82,8 trabajadores públicos por cada 1.000 habitantes. Una cifra muy superior a la media nacional entre 2004 y 2009: 56,4 empleados por cada 1.000 habitantes.
En segundo lugar se ubican un conjunto de comunidades, todas ellas con más de 60 empleados públicos por cada 1.000 habitantes (Madrid, Castilla-León, Aragón y Castilla-La Mancha). Las comunidades con los registros más bajos son las Islas Baleares (47,3) y la Comunidad Valenciana (44,5), mientras que Cataluña registra el ratio más bajo (38,1 por cada 1.000 habitantes).
Pese a ello, Cataluña está entre las CCAA con un mayor aumento medio interanual del empleo público en los últimos cinco años, justo por detrás de Murcia y Baleares. Navarra y Asturias es en donde menos ha crecido el número de empleados públicos entre 2004 y 2009.
Por otro lado, Andalucía presenta el mayor número de empleados públicos, hasta el 18,9% del total nacional (495.820 personas). Le sigue la Comunidad de Madrid, con el 16,1% del total y 422.848 empleados, y en tercer lugar figura Cataluña con el 11,9%.
Y es que, como es lógico, las CCAA más pobladas (Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana) son también las que presentan un mayor número de empleados públicos. Estas cuatro regiones suman en total más de 27 millones de habitantes (58,3% de la población) y más de 1.400.000 trabajadores del sector público.
De estas comunidades, Cataluña es, igualmente, la que ha registrado el mayor incremento de empleados públicos entre 2004 y 2009 (18%), seguida de la Comunidad Valenciana y Andalucía, con porcentajes muy cercanos, y finalmente Madrid, con un 10,7%. Sin embargo, Cataluña sigue registrando un nivel de empleados públicos menor que el resto de autonomías.
Pimec afirma que, "en el contexto de un Estado descentralizado, que el personal de las comunidades autónomas y ayuntamientos haya crecido entre un 12% y un 15% entre 2004 y 2009 parece lógico, pero no tanto que la Administración central continúe creciendo como lo ha hecho con un aumento del 6,1% de sus empleados".
Entre las conclusiones, el informe apunta que "la intervención de la Administración en la economía debe ser la mínima posible cuando los servicios pueden ser prestados por la iniciativa privada con mayores niveles de eficiencia", y que cuando los tiene que prestar forzosamente el sector público, "lo debe hacer con criterios de eficiencia".