En su intervención en una rueda de prensa de la fundación, el director del Gabinete de Coyuntura y Estadística de Funcas, Ángel Laborda, aseguró que "ojalá" se cumpliera la previsión del secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, de que el empleo tardaría cinco años en recuperarse. "Más que un lustro, nosotros pensamos que tardará una década en recuperar las cifras de antes de la crisis", afirmó Laborda.
La información que ofreció Campa ya se consideró pesimista. El secretario de Estado de Economía templaba los ánimos y advertía de que el 8% de paro tardaría al menos 5 años en recuperarse. Una estimación que distaba del optimismo que se ofrece desde Moncloa, donde consideran que la recuperación, "si no ha comenzado ya", está a la vuelta de la esquina.
Según las previsiones de la fundación, el paro seguirá creciendo en España hasta la próxima primavera. A partir de entonces quedará estancado hasta el año 2011, cuando comenzará a recuperarse lentamente.
Laborda auguró que durante el próximo ejercicio la tasa de paro irá cayendo "una o dos décimas por trimetre", y añadió que habrá que esperar más años antes de que el ritmo de recuperación sea mayor, según recoge Servimedia.
En este sentido, apuntó que la previsión es que el paro crezca en los próximos meses hasta alcanzar su techo, que se situará en el entorno de los 4,5 millones de desempleados. Una cifra que responde a una estimación de paro que se ciñe a los métodos de cálculo oficiales del Ministerio de Trabajo.
Atendiendo a los cerca de 0,5 millones de parados que deja fuera cada informe el departamento de Corbacho con su maquillaje, ese techo estaría más cercano a los 5 millones de parados (sin maquillaje estadístico).
Déficit y crecimiento del PIB
Funcas calcula que la economía española retrocedió un 3,6% en 2009, y aunque en su última previsión dijo que seguirá habiendo retroceso en 2010, del 0,5%, el director de coyuntura de la Fundación, Ángel Laborda, dice que esta tasa podría quedarse "en el cero".
Ha advertido de que hasta que el Producto Interior Bruto no crezca el 2% no se creará empleo "por lo que seguiremos con nuestra travesía del desierto", dijo citando el título de la última publicación de la Fundación.
La Fundación de las Cajas espera que en 2011 la economía registre un crecimiento del conjunto del año del 1,3%.
Aunque en el último informe que FUNCAS publica en esta edición de sus cuadernos apunta a que el déficit público alcanzó el 10,5% del PIB este año y estará en el 10,8% en 2010, Laborda también revisó en la rueda de prensa estas estimaciones.
Así, advirtió de que dicho déficit está en el 12% del PIB en 2009 y rondará esta cifra también este año, lo que supone 120.000 millones de euros. También apuntó que no será posible conseguir reducir este saldo al 3% del PIB antes de 2013 como demanda a España la Comisión Europea. "No cumpliremos el objetivo en 2013", dijo Laborda.
El empleo público subió un 27% desde 1998
Por otro lado, Funcas también advierte de que será necesario replantearse la cuestión del empleo público y la remuneración de los asalariados si se quiere sanear las cuentas de las administraciones.
El artículo "Empleo público y consolidación fiscal" publicado en el último número de los Cuadernos de Información Económica de FUNCAS asegura que el empleo público ha crecido un 26,97% entre 1998 y 2009, una expansión que se ha producido sobre todo en las administraciones autonómicas y en los ayuntamientos.
Así, el crecimiento medio por año del empleo público ha sido en ese periodo del 3,79%, si bien en el caso de la Administración central se ha reducido el 3,14% de media en cada ejercicio, mientras que en las comunidades autónomas ha aumentado el 9,41% y en los ayuntamientos, el 3,44%.
En el año 2007, en que el empleo público autonómico subió el 24,8% mientras el estatal se reducía el 31,15%.
Sobre estas fuertes diferencias, el autor de este estudio, el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Granada Miguel González Moreno, explica que mientras la administración central ha sufrido un drástico recorte de empleados en el proceso de descentralización, el aumento del personal en la autonómica no se ha debido sólo a este hecho.
Así, denuncia que en las comunidades se han tomado además "decisiones discrecionales", mientras que en los ayuntamientos la buena coyuntura económica ha hecho que aumentarán sus efectivos humanos, aunque sus retribuciones "no están e consonancia con la capacidad y solvencia de las haciendas locales".
El artículo admite que cualquier ajuste en el empleo y la remuneración de los trabajadores de las administraciones "tendría un efecto cuantitativo considerable" sobre las cuentas.
Sin embargo reconoce que cualquier estrategia debe sopesar el impacto que tendría dicho ajuste sobre el mercado de trabajo, ya que el empleo en el sector público (administraciones y empresas públicas) supone el 14,6% del total, y sólo el de las administraciones es el 13,82%.
En concreto, considera que una reducción del empleo público afectaría más a las comunidades en las que éste tiene un mayor peso, entre las que cita Extremadura, Castilla-La Mancha, Canarias, Castilla y León, Asturias, Aragón, Andalucía y Galicia.
Con respecto a la contención salarial en el sector público, ésta tendría un considerable impacto presupuestario, porque las partidas de personal suponen el 25,89% del gasto público total, y también serviría de guía al sector privado.
Para González Moreno, se deben establecer "algunos límites", como sopesar la incidencia negativa que la reducción de puestos de trabajo y salarial tendría sobre la actividad económica, el consumo y el empleo.