En concreto, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados, el portavoz de ERC, Joan Ridao, aseguró que se compadece de la ministra por tener que elaborar las cuentas "más complejas" del periodo democrático, ya que España está hundida en "el pozo de la recesión", por lo que los Presupuestos, más que sentar las bases de la recuperación, anticipan las bases del "estancamiento por mucho que se desgañite la vicepresidenta económica".
"No suponen ningún golpe de timón para poner los puntos sobre las íes. La 'i' de infraestructuras, innovación, industria e impuestos", señaló Ridao durante su intervención, quien consideró que para esto hace falta un programa económico "integral, coherente y modernizador" que el Gobierno "no tiene".
En este sentido, destacó la necesidad de poner "las luces largas" y huir de enfoques cortoplacistas, al tiempo que rechazó que los Presupuestos sean sociales y austeros, ya que el Gobierno no renuncia a gastar "inútilmente" o a "quemar los muebles para calentar la casa". "Dicen que el gasto no financiero baja un 3,9%, pero es un espejismo", denunció.
"Los Presupuestos ni son austeros, ni inician la senda de la recuperación, son simplemente "decepcionantes", ya que representan una "pura ficción", las cuestas "no cuadran" porque tienen dos y gastan tres", son un sinónimo de "resignación" y recogen una subida de impuestos, no para los ricos, sino para a las "sufridas y menguantes" clases medidas.
Por su parte, el portavoz de IU-ICV, Joan Herrera, lamentó haber presentado la enmienda a la totalidad y explicó que lo hizo para hacer girar la política del Gobierno en los primeros Presupuestos que reconocen abiertamente la crisis económica. A su parecer, el texto del año que viene tiene dos elementos fundamentales: una gran desorientación en lo fiscal y una gran resignación en el gasto.
"Como no hemos podido corregir ni una cosa ni otra, por eso no lo vamos a apoyar", aseguró Herrera, quien señaló que presentan la enmienda para que el Gobierno cambie su política económica, fiscal y su política de gasto, ya que si no lo cambia, el Ejecutivo "no merece el apoyo de mucha gente de la izquierda".
Criticó al Gobierno por "amagar con la izquierda y chutar con la derecha", optando por lo fácil y haciendo que los grupos de la izquierda se queden "sin ningunas ganas de que venga la derecha, pero a la vez perplejos con unas políticas que predican lo que no hacen, que anuncian lo que no cumple, mientras los poderosos continúan tranquilos esperando que algún día les llegue su turno".
Herrera criticó aspectos concretos del Presupuesto, como una política fiscal "injusta, inequitativa y equívoca", que contempla la supresión de la deducción de los 400 euros en el IRPF, la falta de aumento fiscal en las Sicav y la no creación de un nuevo tipo de IRPF para las rentas más altas.