La sentencia, dictada el pasado ocho de abril, estima parcialmente el recuso de acusación presentado por De la Rosa y anula la resolución condenatoria del 1 de abril de 2008 dictada por la Audiencia Nacional, que le consideró como único culpable y absolvió a los otros cinco imputados en la trama.
El Supremo estima así que existió "una sola infracción punible" y considera probado "el absoluto perfeccionamiento del acto apropiativo de 17,4 millones de euros (27,4 millones de dólares)", así como el "haber transcurrido con creces el plazo de cinco años y la prescripción del delito".
La Fiscalía Anticorrupción pedía nueve años de cárcel para el empresario catalán por su responsabilidad en el desvío en 1988 de dicha cantidad desde su puesto de vicepresidente de la papelera española Torras Hostench, posteriormente Grupo Torras, participada en un 24,6% por Kuwait Investment Office (KIO).
En noviembre de 2007, la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional dejó visto para el juicio oral por el "caso Croesus ", en el que actuaron como acusaciones particulares el Ministerio Fiscal y el Grupo Torras. Ésta última solicitaba doce años de prisión para el condenado.