La fusión de Banco Base puede romperse este miércoles después de que su consejo de administración ratificara ayer lo acordado por unanimidad el pasado 23 de marzo de solicitar al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) 2.784 millones de euros, lo que supone casi duplicar las necesidades de capital de 1.447 millones identificadas por el Banco de España.
Las asambleas de las entidades que integran Banco Base, Cajastur, Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), Caja Cantabria y Caja Extremadura, están emplazadas este miércoles a dar 'luz verde' definitiva al proyecto de integración en el Sistema Institucional de Protección (SIP) mediante la segregación de activos al banco, y todo apunta a que no habrá respaldo unánime de las cuatro entidades, según fuentes del sector consultadas por Europa Press.
A falta de que se apruebe este punto del orden del día de las asambleas, el SIP no es irreversible, porque aún no han entrado en vigor la mutualización de los beneficios y las garantías recíprocas de las cajas que lo integran, especificaron las fuentes consultadas. Al tratarse de un acuerdo a cuatro bandas, la negativa de una asamblea daría al traste con el proyecto de fusión fría, recalcaron las fuentes.
Las asambleas no respaldarán previsiblemente el proceso porque la solicitud de fondos públicos a través del FROB de 2.784 millones más el respaldo solicitado anteriormente de 1.493 millones de euros elevaría el recurso global al dinero de público hasta 4.231 millones de euros, cifra que convertiría al Estado en el mayor y principal accionista del SIP en función del valor en libros del grupo. Ello supondría la pérdida del control por parte de Cajastur, Cantabria y Extremadura.
Ante tal posibilidad, el Banco de España baraja un plan B, consistente en vender la CAM a otra entidad o grupo de entidades financieras, ya sean nacionales o incluso extranjeras para evitar su intervención. Y es que, la CAM no podría sobrevivir por sí misma, y el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez (Mafo) quiere evitar a toda costa intervenir la entidad, que hasta ahora era la cuarta caja más grande de España con casi 75.000 millones de euros en activos, para no dañar la imagen del sector financiero nacional.
La solicitud de 2.784 millones de euros al FROB recoge la cantidad de capital adicional de 1.447 millones identificado por el Banco de España para cumplir con los nuevos requisitos de capital establecidos por el Gobierno en la Ley de Reforzamiento Financiero más las necesidades de solvencia derivadas de la situación de la CAM.
La petición de ayudas encara además las exigencias de solvencia incluídas en las pruebas de estrés que se aplicarán al sistema financiero español bajo mandato de la autoridad bancaria europea (EBA) en los próximos meses y cuyos resultados se darán a conocer en el mes de junio.
La caja alicantina contaba con una morosidad del 4,66% al cierre del primer semestre de 2010, según el último informe de gestión de los estados financieros de la entidad recogidos en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), pero una vez integrada en Banco Base ha aflorado una tasa de impago cercana al 9% así como una elevada exposición al sector inmobiliario.
Las cajas de ahorros de Banco Base no son proclives a integrarse en un proyecto que resultaría capitaneado por el Estado desde su nacimiento, indicaron las fuentes consultadas. La CAM celebra este miércoles su asamblea general a las 11.30 horas y a partir de las 17.00 horas harán lo propio Caja Cantabria, Caja Extremadura y Cajastur.
La CAM ha mantenido contactos en los últimos días con otras entidades de cara a otro intento de integración, entre las que figuran Banco Mare Nostrum, Santander, BBVA, Popular y La Caixa, mientras el Banco de España y la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) siguen mediando para que la fusión no se rompa.