Así, aunque el documento es una declaración de intenciones sobre la voluntad de acuerdo, Miliband consideró que la mera asunción de esta necesidad es "altamente significativa", puesto que traslada la idea de la "necesidad real" que los miembros del G-20 detectan en la apuesta por la "recuperación ecológica" para reactivar el crecimiento.
El titular de Cambio Climático de Reino Unido reivindicó la necesidad de acometer un debate serio en materia de reducción de emisiones y destacó la trascendencia del consenso hoy recabado, antes de la reunión del G-8 que en julio se celebra en Cerdeña (Italia) y como preludio de las aspiraciones que deberán regir la cumbre de Copenhague. "Este G-20 es importante porque es el momento de tener ambición para Dinamarca", insistió.
En este sentido, detectó un cambio de tendencia en la visión de la ecología en el panorama político y se mostró convencido de que "hace seis meses no estaba así de centrado". Por contra, subrayó que "ahora sí", con una orientación que sitúa a los países "en buena posición" para lograr un acuerdo a final de año. "El hecho en sí mismo de que la recuperación ecológica y el recorte de emisiones sean una prioridad para el G-20, como dijo ayer mismo Obama, es significativo", declaró.
Al respecto, recordó que cada país ha asumido compromisos específicos para rebajar el dióxido de carbono que emiten a la atmósfera y valoró que esta actitud sea vista como un " corriente dominante " en las recetas de "salida de esta recesión". "El acuerdo de hoy es muy importante para avanzar y realmente importa haberlo establecido antes del G-8", concluyó.