LD (Europa Press) Por canales, las compras de particulares registrarán en julio una caída del 31 por ciento, hasta 67.390 unidades, lastradas por las subidas de los tipos de interés, el fuerte endeudamiento hipotecario de las familias y la falta de la confianza en la economía.
Por su parte, las ventas a compañías de alquiler experimentarán un descenso del 12,7 por ciento en julio, hasta situarse en 22.780 unidades, mientras que las compras por parte de empresas bajarán un 18,2 por ciento en julio, con 35.662 unidades, lo que pone de manifiesto la resistencia de los concesionarios a seguir automatriculando coches, a pesar de la presión de los fabricantes.
La patronal de los concesionarios estima que las matriculaciones de automóviles cerrarán este año con una caída del 20 por ciento, y recuerda que junio y julio son tradicionalmente dos de los meses más fuertes del ejercicio al concentrar una quinta parte de las ventas anuales, pues los automovilistas suelen adelantar sus compras para "rodar" el coche nuevo en las vacaciones de verano.
Las matriculaciones de automóviles alcanzaron 702.368 unidades durante los seis primeros meses del año, lo que supone un retroceso del 17,6 por ciento respecto al mismo período de 2007 y supone la mayor caída desde el primer semestre de 1993.