"En España, rebajar los niveles de protección a los trabajadores fijos hasta los niveles mínimos observados en la eurozona reduciría la proporción de trabajadores temporales en 13,5 puntos porcentuales", apunta la institución dirigida por Dominique Strauss-Kahn.
De este modo, la tasa de temporalidad en el mercado laboral español caería hasta el 11,3% desde el 24,8% actual, según los cálculos del Fondo Monetario Internacional (FMI) recogidos en un informe sobre los desafíos para el empleo elaborado junto a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) de cara a la conferencia de alto nivel que se celebrará en Oslo el 13 de septiembre.
Dicha conferencia, presidida por el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, y por el director general de la OIT, Juan Somavia, contará entre sus principales oradores con el presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero; la ministra de Economía de Francia, Christine Lagarde; el secretario de estado de Trabajo del Reino Unido, Ian Duncan Smith; la presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf; el primer ministro de Grecia, George Papandreou; y la secretaria general de la Confederación Sindical Internacional (CSI), Sharan Burrow.
El citado informe señala a España como el país en el que más se ha incrementado el desempleo, aumentando en 10 puntos porcentuales, así como donde se registra la mayor tasa de desempleo entre los jóvenes, donde la tasa de paro se ha duplicado hasta superar el 40%.
30 millones más de parados
"Más de 210 millones de personas en todo el mundo carecen de empleo en la actualidad, unos 30 millones más que al inicio de la crisis en 2007, de los que tres cuartas partes corresponden a las economías avanzadas", apunta el documento.
En este sentido, el FMI y la OIT calculan que el desempleo se ha incrementado de media en tres puntos porcentuales entre las economía avanzadas, con España y EEUU a la cabeza de la destrucción de empleo, frente a la situación registrada en Alemania y Noruega, donde el desempleo se ha reducido o apenas ha aumentado.
De hecho, los autores del informe señalan que EEUU, con 7,5 millones de desempleados más desde 2007, y España, con 2,7 millones más, son responsables de dos terceras partes de los empleos destruidos entre las economías avanzadas desde el inicio de la crisis.