Roldán explicó que las mayores exigencias de recursos propios mínimos se debe a que las autoridades quieren que bancos y cajas de ahorros estén en disposición de soportar tanto las pérdidas esperadas como las inesperadas, para que sean capaces de seguir operando, incluso tras entornos económicos muy desfavorables.
"La función de intermediación es tan vital para el crecimiento económico que tienen que ser capaces de soportar situaciones extremas", dijo el director general de Regulación del Banco de España, que participaba en unas jornadas organizadas por la patronal de las cajas de ahorros sobre los retos de la Presidencia española de la UE.
"El sentido de la reforma de la regulación de los recursos propios mínimos es 'a más', por las lecciones extraídas de la crisis financiera", recalcó Roldán. Antes de la crisis, se estudiaba aumentar los requerimientos de capital por cartera de negociación en un 10%, mientras que ahora se debate incrementarlos un 300%. "Esta es una de las grandes sorpresas de la crisis", consideró.
Asimismo, Roldán subrayó que crecerán las exigencias de capital para las entidades financieras por realizar titulizaciones complejas, así como los colchones para afrontar crisis económicas, con el fin de que no se produzcan "indebidas restricciones de crédito".
Al ser preguntado sobre la tesis que defiende que mayores requerimientos de capital puede derivarse en una restricción del crédito, Roldán sostuvo que "no se puede evitar pedir más capital", pero matizó que "hay que hacerlo de forma proporcionada, en función de los riesgos".
Se trata, especificó, de "ser extremadamente cuidadosos y no disparar a todo lo que se mueve", si bien incidió en que "al final, no hay nada más procíclico que una entidad financiera mal gestionada y poco capitalizada", modelo que falla en momentos de crisis y deja de conceder crédito adecuadamente, lo que puede empeorar el escenario económico.
Mercado financiero "en la sombra"
Sobre los orígenes de la actual crisis financiera, Roldán destacó la incidencia que han tenido "los agentes en la sombra", que han estado sosteniendo un sistema financiero al margen de la regulación y la supervisión del modelo de negocio clásico de las entidades financieras.
En este sentido, el director general de Regulación del Banco de España mencionó la concesión de créditos realizados "sin provisiones ni capital", como ha sido el caso de las hipotecas 'subprime' que inundaron el mercado inmobiliario norteamericano y contagiaron al sistema financiero mundial a través de las titulizaciones y derivados financieros. "La crisis ha puesto de manifiesto los peligros de tener actividad financiera fuera de regulación", apuntó.
Roldán explicó que las crisis financieras son "eventos que pasan cada 100 años" y que el origen de la actual crisis esta en el "modelo bancario", ya que en el momento que se produjo la "tensión financiera" previa a la llegada de la recesión, los efectos del crédito 'mal dado' "acabo recayendo sobre las propias entidades financieras, que tuvieron que ser rescatadas en muchos casos.