La tragedia laboral española tiene nombres y apellidos y, a la vista de los datos, se intensifica. Así, según el último informe regional sobre empleo elaborado por la Asociación de grandes Empresas de Trabajo Temporal (Agett), el número de hogares en los que todos sus miembros activos están parados asciende a 1.219.915, lo que equivale al 9,5% del total de hogares españoles. Es decir, en casi 10 de cada 100 hogares ya no se perciben rentas del trabajo.
Desde que comenzó la crisis -que la entidad sitúa en el tercer trimestre de 2007-, el número de hogares con todos sus miembros en paro ha aumentado en 840.000. Lo grave es que dicha tendencia “continuará con bastante probabilidad y sus consecuencias sociales serán especialmente relevantes dada la escasez de entrada de ingresos en el conjunto del hogar”, incide el informe.
De hecho, si se incluyen a aquellos hogares donde al menos la mitad de los activos están en paro, esta cifra se eleva a los 2.760.250, el 21,5% del total de hogares españoles (casi 1,6 millones de hogares más en esta situación desde que comenzó la crisis).
Canarias, Andalucía, C. Valenciana y Murcia continúan siendo las comunidades que presentan un porcentaje de hogares con todos sus miembros activos en paro superior al total nacional, según los datos del último trimestre de 2009.
La región con un mayor número de hogares en esta circunstancia es Canarias, que toma el relevo a Andalucía, aumentando su tasa del 13,5% al 15,2%, mientras en el otro extremo se sitúa Navarra, por quinto trimestre consecutivo, con un 5% de hogares con todos sus miembros en paro.. En 14 de las 17 comunidades la situación empeora, hecho que especialmente relevante en Baleares (aumenta un 4,1% intertrimestral).
Baja la población activa
Por otro lado, “por primera vez en la historia, España ha perdido activos laborales”, advierte el estudio. En concreto, “han salido de la actividad laboral 92.200 personas en el último año (-0,4% interanual) debido al, cada vez más intenso, efecto desánimo. “Ya son doce de las diecisiete CCAA las que registran pérdidas de población activa respecto al mismo periodo del año anterior (tres más que en el trimestre precedente), destacando las comunidades de Asturias, Cataluña, Cantabria, País Vasco y Galicia".
Desde que comenzó la crisis se han destruido 1,86 millones de empleos netos, de los cuales el 65% se han perdido en 2009. El factor estacional desfavorable unido al todavía fuerte factor recesivo hacen, por tanto, que el número total de ocupados se sitúe en los 18,6 millones, el nivel más bajo desde el primer trimestre de 2005.
El sector privado destruye empleo asalariado en todas las CCAA respecto al mismo periodo de 2008 (a una tasa del -6,4% interanual en el conjunto de España), mientras el sector público lo sigue creando en 11 de ellas (a un ritmo del 1,2% de media nacional).
En este sentido, Cataluña, Andalucía y C. León han generado el 75,6% del empleo público en el último año. No obstante, “en ninguna CCAA el crecimiento del empleo público es capaz de compensar la pérdida de empleo del sector privado”, señalan los expertos.
Desde el tercer trimestre de 2007, España ha incrementado el paro en más de 2,5 millones de personas; el 44% se han generado en el último año. El número de desempleados asciende a 4.326.500 personas en el último trimestre de 2009.
Todas las CCAA, sin excepción, aumentan su tasa de paro respecto al trimestre precedente. La comunidad que más incrementa su tasa de desempleo es Baleares, con un aumento de 4,72% intertrimestral, alcanzando una tasa del 19,5%. Además, la tasa de paro balear podría haber ascendido hasta el 23,8% si la población activa no se hubiera reducido.
El paro de larga duración
Los desempleados de larga duración ya suponen el 34,5% del desempleo, cuando en el trimestre anterior suponían menos del 30% de los parados. Han pasado de 393.200 parados de más de un año de duración al inicio de la crisis, a ser 1.493.500 en el último trimestre de 2009, el volumen más elevado desde 1998.
Esto supone un incremento de más de un millón de personas (279,8%) desde el tercer trimestre de 2007. La dinámica del incremento de este tipo de desempleo se observa en todas las CCAA, con la excepción de Cantabria y Extremadura. Destaca, en negativo, la comunidad asturiana, donde 4 de cada 10 parados llevan más de un año buscando empleo y no lo encuentra. Le siguen Canarias (38,5%), Andalucía (36,8%) y La Rioja (36,4%). Por el contrario, las CCAA con menor porcentaje de parados de larga duración son Navarra y Cantabria, al igual que ocurría el trimestre anterior.
Bajan los contratos indefinidos
Por otro lado, el ajuste del empleo se está dando ahora en la contratación indefinida en todas las CCAA. La contratación indefinida presenta caídas interanuales superiores al 25% (92.669 contratos menos) frente al 2,1% de la temporal (-72.873).
Sólo el 3,5% de los contratos temporales realizados en el cuarto trimestre se han convertido en indefinidos, lo que supone el peso más reducido desde que se elabora el Informe Regional Agett. Las comunidades que más apuestan por la contratación indefinida directa son Madrid, Murcia y Extremadura.
Las ETTs reclocan 4,5 veces más que el Inem
Por último, el estudio destaca que los Servicios Públicos de Empleo (SPE, antigio Inem) intermediaron el pasado año en 3 de cada 100 colocaciones (381.050 colocaciones sobre un total de 13.977.537), mientras que la tasa de intermediación de las ETTs fue del 12% (con cerca de 1,7 millones de colocaciones). Es decir, las empresas privadas de colocación lo hacen en una proporción 4,5 veces mayor que el sector público.
Los servicios públicos de empleo sólo colocaron a un joven de cada 100 en 2009. Sin embargo, las ETTs gestionaron nueve veces más colocaciones que los SPE a jóvenes menores de 25 años, y su intermediación es 4 veces superior en el caso de las mujeres. Ambos, principales colectivos de difícil inserción. Las ETTs intermedian más que los servicios públicos de empleo en todas las CCAA salvo Extremadura.