(Libertad Digital) El informe fue presentado el miércoles por el vicepresidente de la fundación, Jesús Caldera, que aseguró que para lograr este objetivo, que libraría a España de la emisión de gases de efecto invernadero y de los riesgos que implica la energía nuclear, sólo hace falta "voluntad política" y una apuesta por las nuevas tecnologías.
Se trata del mismo mensaje que lanzó Greenpeace en julio de 2005. El grupo ecologista señalaba que en 2050. La multinacional ecologista decía entonces que las energías renovables podrían abastecer diez veces todas las necesidades energéticas de España en 2050. Ya entonces los gráficos y tablas que la acompañan hacían referencia alguna a los costes totales. Además, se requeriría más de la mitad del territorio español para hacer sitio a las centrales.
"Los últimos cinco años han sido suficientes para demostrar que la apuesta política y empresarial por este sector en España no es ninguna quimera", aseveró Caldera, que recordó que la administración Obama ha elogiado el desarrollo renovable español y que actualmente el país importa el 90% de la energía que consume.
Caldera aseguró que el actual modelo energético de España, basado en su mayoría en fuentes fósiles, es "insostenible" y advirtió de que no habrá un futuro para el planeta "si no cambiamos el modo de producir y consumir energía", informa Efe.
Sin embargo, Caldera parece olvidar que la creación de cada puesto de trabajo verde cuesta a los contribuyentes una media de 500.000 euros e implica la destrucción de dos empleos en otros sectores privados más productivos, según un reciente informe elaborado por analistas del Instituto Juan de Mariana. Además, dicha propuesta choca frontalmente con las alertas del ministro de Industria, Miguel Sebastián, que opta por reducir las primas a las renovables.
Cierre de centrales
Respecto a los reactores nucleares ya existentes, en el informe se propone que se vayan cerrando cuando expiren sus licencias de explotación , tras 40 años de vida útil, siempre y cuando no sea necesario cerrarlas antes por cuestiones de seguridad. Añade que antes de cerrar las centrales se debe asegurar que su producción puede ser sustituida por otra fuente de energía para garantizar el suministro y previamente se deben diseñar planes de reactivación económica para las zonas afectadas.
Sobre la central de Garoña, la Fundación recomienda al Gobierno que no le renueve la licencia de explotación, que expira en junio, "por su antigüedad, sus potenciales problemas de seguridad y por ser perfectamente sustituible por fuentes renovables".
Tras alabar la apuesta del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero por las energías renovables en el diseño del nuevo modelo económico, Caldera abogó porque el Ejecutivo garantice por ley un sistema de incentivos propicio para el despliegue de fuentes de generación eléctrica renovables.
Además, en el informe se recomienda que el Gobierno incluya al sector de forma prioritaria en sus planes de reactivación económica , dada su contribución a la creación de empleo y del buen posicionamiento internacional de la industria española de energías renovables, en consonancia con la nueva Ley sobre Energía Sostenible que ha propuesto Zapatero con el fin de cambiar el actual modelo productivo español.
En la actualidad, el sector emplea a 175.000 personas y el 80% de los contratos son de carácter indefinido, explicó Caldera, que aseguró que las energías renovables son las únicas que podrían permitir que todo el mundo tenga acceso a la energía eléctrica.
También insta al Ejecutivo a incentivar a Red Eléctrica y a las suministradoras de electricidad a modernizar sus redes de transporte y distribución, y se propone que se instaure el derecho de todo ciudadano a ser productor de energía.
Iberdrola pide más nuclear
Por último, el informe de la Fundación Ideas del PSOE se enfrenta a la opinión, no sólo de expertos en la materia, sino de las propias compañías eléctricas. Así, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, manifestó el jueves que España necesita "un debate intenso" sobre su futuro energético, sin excluir la opción nuclear, porque no puede seguir teniendo una dependencia del exterior del 85% en sus fuentes de generación de energía.
Galán, que se trasladó a la localidad de Eaglehsham (Escocia) para inaugurar el mayor parque eólico terrestre de Europa, ofreció una conferencia de prensa en la que expresó su deseo de que el debate sobre política energética que previsiblemente celebrará el Parlamento tras el verano aborde todas las posibilidades.
"Espero que sea un debate intenso. El país lo necesita. Y que se hable con toda transparencia y claridad. No podemos seguir teniendo el 85% de dependencia exterior. No podemos seguir siendo sistemáticamente un país con una intensidad energética por unidad de PIB creciente", subrayó el presidente de la eléctrica.
La UE apuesta por la nuclear
El debate parlamentario sobre este tema "tendrá que contemplar todas las variaciones", declaró Sánchez Galán cuando se le preguntó sobre la necesidad de dar un impulso a las centrales nucleares. El presidente de Iberdrola consideró necesario analizar "cuál es la demanda de energía que va a haber en nuestro país en los próximos años y cómo se va a suministrar esa energía, en lo cual indudablemente la energía nuclear va a tener su peso".
Galán destacó que el Reino Unido, donde Iberdrola adquirió ScottishPower (una de las tres eléctricas más importantes del país) en 2007, "ya ha tenido ese debate y ha tomado la decisión de construir una serie de centrales nucleares". "Nosotros como operador importante de este país, como productor de energía, vamos a estar en ese proceso para, en el momento oportuno, construir las centrales nucleares necesarias", afirmó.
Sobre el Real Decreto Ley recientemente aprobado por el Gobierno que reforma la normativa referente a energías renovables, dijo que es positivo porque "pone orden en el tema fotovoltaico" y porque ayuda a dar estabilidad a un sector "que tiene que estar perfectamente planificado".