LD (EFE) El líder laborista respondió de este modo a las críticas de quienes advierten de que esta medida desplazará a Londres como centro financiero europeo. Asimismo, Brown replicó a las organizaciones empresariales británicas, que sostienen que esa "penalización" a los más ricos provocará la pérdida de un importante número de empleos cualificados, desatando una "fuga de cerebros" hacia otros países con menor tipo impositivo.
Ante estas acusaciones, Brown dijo hoy en un acto en Londres que la decisión no supone la muerte del Nuevo Laborismo, lanzado por él y Tony Blair en 1997, sino que sirve al objetivo de que el Estado pueda "dar las mismas oportunidades a todos". A juicio del primer ministro, continúa siendo "necesaria" la contribución de "aquellos que más han ganado en los últimos años".
El Presupuesto General del Estado presentado el miércoles por el ministro de Economía, Alistair Darling, contempla una subida del 5 por ciento en el tipo marginal máximo aplicable a las personas que ganen más de 150.000 libras al año, hasta el 50 por ciento, así como la eliminación de las desgravaciones fiscales para quienes ingresen más de 100.000 libras anuales (111.000 euros).
La idea ha sido duramente criticada por los agentes sociales, que acusan al Ejecutivo de romper con el Nuevo Laborismo impulsado en 1997 por Blair, que defendió que la economía británica debía apoyarse en el talento y la productividad, y no en subir impuestos.
Rompe con el Nuevo Laborismo
Así, el Instituto de Investigaciones Económicas y Empresariales (CEBR, por sus siglas en inglés), calcula que en los próximos tres años se perderán un total de 140.000 puestos de trabajo como consecuencia de esta disposición.
Asimismo, el CEBR alerta de que será Suiza el país que más se beneficie de esta subida impositiva, ya que, a su juicio, las grandes fortunas podrían optar ahora por trasladar sus cuentas a este país europeo. De hecho, los expertos calculan que la medida, que afectará a cerca de 700.000 británicos, podría costarle cerca de 200 libras (222 euros) mensuales a una persona con unos ingresos de 150.000 libras anuales.
La subida afectará a 700.000 británicos
A ese respecto, la Confederación Británica de Industria (CBI) también ha mostrado su disconformidad con la subida impositiva a los más acaudalados, pues "no establece un camino creíble para devolver la salud a las finanzas públicas del Reino Unido".
El secretario general de la Trades Union Congress (TUC, central sindical de este país), Brendan Barber, ha destacado que la subida de impuestos "afecta al grupo de personas que ha sido culpable, en gran parte, de la actual situación".
Por ello, en opinión de Barber, es "justo" que esas personas paguen ahora "su parte de la recuperación económica". En concreto, esta medida permitirá al Tesoro recaudar cerca de 7.000 millones de libras (7.800 millones de euros) en el ejercicio fiscal 2009-2010, unos ingresos que destinará a cubrir una parte del déficit fiscal de las cuentas públicas, que se prevé ascienda a 175.000 millones de libras (195.000 millones de euros). También la prensa británica se sumaba hoy a las críticas y rechazaba unánimemente las cuentas presentados par Darling.
De esa manera, The Guardian cree que los nuevos presupuestos "exprimen al rico", mientras The Daily Telegraph los considera "el último testamento de un hombre derrotado", en referencia al ministro de Economía. En una línea parecida, The Independent asegura que Gordon Brown "ha roto el Nuevo Laborismo", en tanto que The Times habla de "los presupuestos de la evasión fiscal".