LD (Agencias) En un discurso pronunciado ante la Comisión de Déficit de la Cámara de Representantes estadounidense Bernanke ha señalado que "seguimos esperando que la actividad económica toque fondo este año y que después se levante a finales del mismo", señaló Bernanke. "Los recientes datos sugieren que el ritmo de la contracción económica podría haberse ralentizado", aclaró.
No obstante, Bernanke recordó que la economía estadounidense se ha contraído muy duramente en los últimos meses, por lo que el mercado laboral seguirá débil durante algunos meses y el desempleo seguirá aumentando .El presidente de la Reserva Federal instó al Congreso y a la Casa Blanca a recortar el déficit récord en EEUU y advirtió que de no hacerlo podría erosionar la confianza de los consumidores y las perspectivas económicas a largo plazo.
"El mantener la confianza de los mercados financieros requiere que (...) comencemos a planificar para restaurar el equilibrio fiscal", dijo Bernanke en el texto de su discurso ante el Comité Presupuestario de la Cámara de Representantes.
La Casa Blanca prevé que el déficit presupuestario alcance los 1,8 billones de dólares este año , una cifra más de cuatro veces superior al dato récord registrado el año pasado.
La recesión por la que atraviesa el país ha agravado las cuentas públicas debido a los menores ingresos fiscales y al mayor gasto del Gobierno , que ha destinado miles de millones de dólares al rescate del sector financiero.
Bernanke dijo que esa intervención pública era "necesaria y apropiada" para hacer frente a la peor crisis financiera desde 1930, a pesar de haber agravado el déficit del país.
El fuerte endeudamiento de Estados Unidos ha contribuido a alimentar el temor en los mercados a un posible recorte de la calificación máxima triple A de la deuda soberana del país, lo que ha presionado el dólar a la baja en los mercados internacionales.
La Casa Blanca aseguró a finales de mayo no estar preocupada ante esa posibilidad e insiste en que el objetivo del presidente de EEUU, Barack Obama, es impulsar un plan de recuperación que cree puestos de trabajo y reactive la economía.
Aun así, la nueva administración reconoce que a medio y largo plazo es necesario resolver el problema fiscal del país.