Aguirre no está dispuesta a quedarse de brazos cruzados ante las cada vez más alarmantes cifras económicas, las negras previsiones de los organismos internacionales para la economía española, y el anuncio de Zapatero de subir los impuestos.
Madrid quiere seguir siendo la locomotora de España que le ha situado en los últimos años a la cabeza de las regiones en creación de empleo y desarrollo empresarial. Para ello, el Gobierno regional estudiará este jueves una ley con un paquete de medidas liberalizadoras, así como reformas administrativas, que facilitarán la creación de riqueza en la región con nuevos empleos, negocios e inversiones.
En definitiva, se trata de simplificar al máximo "el papeleo" para el desarrollo de actividades económicas y de agilizar el proceso para la creación de empresas y negocios en los sectores que constituyen el motor de la economía madrileña.
Entre otras cosas, por ejemplo, se modifican los silencios administrativos negativos por positivos, se eliminan trámites con la administración regional y se reducen los plazos de respuesta de la administración en más de 50 trámites, como medidas para agilizar la creación de nuevas empresas.
Esta ley, que conllevará la supresión o modificación de más de 70 normas de rango autonómico, será aprobada de forma inminente por el Consejo de Gobierno con el objetivo de que esté en aplicación antes de que finalice el año.
Nuevos establecimientos comerciales
¿Qué supone esto en la práctica? Entre otras iniciativas, con la nueva ley se facilitará la creación de nuevos centros comerciales y la ampliación de los ya existentes, mediante la supresión de la autorización hasta ahora necesaria de la administración autonómica, sustituyéndola por una comunicación una vez otorgada por el Ayuntamiento la licencia municipal.
También, por ejemplo, esta nueva ley fomentará la creación de nuevas áreas de servicio en carretera, con la supresión de la distancia mínima de 10 kilómetros entre áreas de servicio de carretera y la posibilidad de ofrecer servicios de hostelería y hospedaje en áreas de servicio situadas cerca de los núcleos de población, hasta ahora prohibido. Con esta normativa, las áreas de servicio cercanas a zonas urbanas podrán ofrecer servicios de restauración y hospedaje a sus clientes.
Más negocios turísticos
La ley de apoyo a la empresa madrileña está orientada también a potenciar el sector turístico dado que es uno de los sectores empresariales con mayor empuje y posibilidades de negocio en la región.
Las cifras lo evidencian: de los 6 millones de visitantes que llegaron a la Comunidad en 2003 se ha pasado a cerca de 9,2 millones en 2008, por delante de países como Suiza o Bélgica, y resistiendo a la mala situación económica mejor que el conjunto de España.
Además, la Comunidad de Madrid es la única región española que creció en el número de llegadas de turistas extranjeros durante los ocho primeros meses del año, con un incremento del 1,9% en relación al mismo periodo del año anterior.
La Comunidad fomentará la puesta en marcha de nuevos alojamientos hoteleros, servicios de restauración y agencias de viaje al suprimir las autorizaciones de clasificación necesarias en la actualidad por una comunicación o una declaración responsable. Esta simplificación administrativa evitará demoras y costes innecesarios en la implantación de las empresas turísticas en la Comunidad.
Así, los empresarios interesados en abrir un alojamiento turístico (hoteles, hostales, casas rurales, etc) podrán hacerlo de forma inmediata con una comunicación o declaración responsable a la Comunidad, ahorrándose trámites de hasta seis meses de duración.
Además, el Gobierno regional permitirá que los restaurantes de los hoteles reciban público en general y no sólo clientes del hotel como estaba regulado hasta el momento. Además, los restaurantes o bares de los hoteles podrán realizar reformas para disponer de acceso directo desde la calle, algo que hasta ahora no estaba permitido.
Apertura del mercado industrial y energético
Desde el punto de vista industrial, esta ley que modernizará la economía madrileña simplificará los trámites administrativos que hasta ahora se pedían a los trabajadores de los servicios industriales y energéticos (electricistas, revisión y mantenimientos de ascensores, instalación y mantenimiento de aparatos de calefacción, climatización y gas, instalaciones frigoríficas y eléctricas, etc).
Todos estos trabajadores podrán a empezar su negocio de forma automática, al sustituirse el permiso de actividad de la Comunidad por una sencilla comunicación, un trámite que ahora duraba hasta tres meses. Además, se les ampliará de forma indefinida la validez del carné profesional, que ahora es de cinco años.
Además, esta ley facilitará la incorporación de empresas del mercado industrial y energético a la Comunidad de Madrid. De este modo, se eliminará la obligación de que empresas procedentes de otras comunidades autónomas se inscriban en un registro específico, que debía actualizarse cada cuatro años.
Reducción de plazos en los trámites con la administración
La Comunidad, a través de esta nueva ley, reduce a la mitad los plazos de más de 50 procedimientos que llevan a cabo particulares y empresas con la administración regional, y sustituye los efectos negativos por positivos o estimatorios por la falta de resolución expresa en el plazo establecido.
De esta forma, por ejemplo, la Comunidad resolverá en un plazo máximo de dos meses trámites como las autorizaciones de establecimientos de óptica y secciones de óptica en oficinas de farmacia o las autorizaciones para la puesta en marcha de centros de acción social y servicios sociales. En ambos casos, superado ese plazo, el silencio administrativo por parte de la Comunidad pasa de ser negativo a positivo.