Xavi Hernández cumplirá el próximo viernes contra la República Checa en Granada, en partido de la fase de clasificación para la Eurocopa 2012, su partido número 100 con la camiseta de la selección española. Será, pues, el jugador español con más encuentros como internacional tras Andoni Zubizarreta (126), Iker Casillas (117) y Raúl González (102).
En vísperas de ese encuentro, en una entrevista que publica este lunes el diario El País, el jugador del Barcelona se muestra orgulloso de defender los colores de España. "Soy muy de La Roja. Me gusta mucho ir a la selección. Es un plus para mí. Una vez Luis Aragonés me dijo: 'Sentimientos e ideología al margen, es fútbol. ¿A usted no le gusta jugar al fútbol?'. Y tiene razón. ¿A quién no le gusta jugar al fútbol? No sé, yo me he criado en el Barcelona, ésa es mi casa, pero la selección me ha dado mucho, me ha hecho mejor todavía. Yo me veo como era el primer día que fui a la selección, me veo ahora... ¡y no me lo creo!", afirma en la entrevista.
El jugador, que dice tener "la sensación de que llevo en la selección toda la vida" –debutó con el equipo nacional el 15 de noviembre de 2000 en un amistoso contra Holanda (1-2)–, dice que "nunca" ha tenido ningún problema en la selección por el hecho de ser catalán: "Nunca he tenido problemas por eso. Yo soy de las personas y hay muy buena gente. He calado, me han calado a mí, y siempre me he sentido a gusto y respetado. Más allá no entiendo de otra cosa. Me he sentido valorado en la selección. Y de aquí para allá igual, el Barcelona siempre ha ayudado a que yo pueda ir a la selección, siempre".
Preguntado por qué aporta un jugador hecho en el Barça a la selección, Xavi dice que "nosotros somos unos románticos". "Básicamente, estilo, el gusto por tocar la pelota. El futbolista catalán o hecho en el Barça cuida muy bien la pelota. El que viene del Madrid, por ejemplo, es muy competitivo, muy fuerte mentalmente, nunca baja los brazos", agrega.
Xavi Hernández también recuerda cómo le acusaron de taparse la bandera española en las medias durante un partido contra Letonia (0-2), en junio de 2007. "Eran las rayas de Adidas", dice al respecto. "No quise entrar nunca en eso porque es ridículo. ¿Qué compromiso quieren que demuestre si he jugado 99 veces con la selección? ¿Qué más quieren? Yo hago las cosas porque las siento y doy todo lo que tengo. Juego en este equipo desde los 16 años. He jugado con golpes, esguinces... pero no se lo cuento al periodista: 'Oye mira, que voy a forzar'", asegura.
Entre sus mejores recuerdos con la camiseta de España, Xavi rememora las finales ganadas en el Mundial de Sudáfrica y la Eurocopa de Austria y Suiza 2008 ante Holanda y Alemania, respectivamente, pero también con el amistoso que la selección española ganó a la Inglaterra de Sven Goran Eriksson (1-0) en el Santiago Bernabéu, "el día que echaron a Rooney", como él mismo recuerda. "¡Me aplaudieron en Madrid, imagínate!", le comenta el jugador de Tarrasa al periodista de El País.