Xabi Alonso, que lucía barba y se mostró muy activo durante el entreno, llegó este mismo miércoles por la mañana a Madrid, pasando a continuación el pertinente reconocimiento previo a la firma del contrato. El jugador guipuzcoano, de 27 años, ha conocido a su nuevo técnico, el chileno Manuel Pellegrini, y ha saludado a sus nuevos compañeros, algunos de los cuales ya conocidos de la selección española. El centrocampista saltó el último al césped, siendo recibido con aplausos de sus nuevos compañeros, a los que saludó uno por uno.
El delantero holandés Klaas-Jan Huntelaar, cuya posible marcha al Milan parece inminente, se entrenó con normalidad, a diferencia de Sergio Ramos, el también holandés Wesley Sneijder y el brasileño Marcelo, quienes se marcharon al gimnasio. Ruud van Nistelrooy y el malí Mamadou Diarra, que se recuperan de sus respectivas lesiones, se ejercitaron al margen de sus compañeros. Xabi Alonso abandonó por unos momentos el grupo para departir con ellos.
Sin ausencias significativas, la sesión comenzó con la habitual charla de Pellegrini. A continuación, los jugadores blancos realizaron carrera continua, a la que siguieron toques con el balón. Ha sido la última sesión de entrenamiento del conjunto madridista antes del viaje que emprenderá este jueves a la ciudad canadiense de Toronto, donde el viernes disputará un amistoso contra un equipo local. Dentro de esa 'minigira' americana, el Real Madrid visitará también Estados Unidos, donde jugará otro amistoso contra el DC United, en Washington.
Sin problemas en el reconocimiento
Por la mañana, Xabi Alonso superaba sin ningún problema las pruebas médicas a las que era sometido. Así lo expresaba Carlos Díez, director de los servicios médicos del Real Madrid. "Estamos muy satisfechos por los resultados, Xabi Alonso está apto para reincorporarse al grupo cuando el cuerpo técnico lo considere apropiado", dijo el galeno.
El cuerpo médico madridista se centraba especialmente en el aparato locomotor porque el jugador había sido intervenido del tobillo debido a una fuerte entrada que recibió de Frank Lampard y por la que tuvo que pasar por el quirófano y permanecer tres meses de baja.