El español David Ferrer alcanzó la final del Másters 1.000 de París-Bercy, que ganó el año pasado, tras derrotar a su compatriota Rafael Nadal, número uno del mundo, por 6-3, 7-5, por lo que se medirá contra el serbio Novak Djokovic.
Visiblemente incómodo, el mallorquín no pudo con el de Jávea, que demostró que en la pista cubierta parisiense se siente como en casa.
Para revalidar el título de Bercy, el único Masters 1.000 que figura en sus vitrinas, Ferrer deberá vencer a un Djokovic al que no gana desde 2011.