L D (EFE) El regreso de Sharapova es la principal atracción de este torneo, previo al de Roland Garros, dotado con 600.000 dólares en premios, en el que la danesa Caroline Wozniacki, finalista en el Masters 1000 de Madrid, y la china Jie Zheng son las dos primeras favoritas. Precisamente Wozniacki será la próxima rival de la ex número uno del mundo rusa, que figura esta semana en el puesto 126, y que necesitó dos horas y 35 minutos para deshacerse de Garbin, 68 del mundo.
Después de operarse del manguito rotador del hombro derecho a finales del pasado año, Sharapova hizo una tímida reaparición en el torneo de Indian Wells, siete meses después de la intervención, solo para disputar la prueba de dobles con su compatriota Elena Vesnina. Maria se ha perdido los dos últimos torneos del Grand Slam, pero no quiere faltar a la cita de Roland Garros que comienza este domingo, y para ello había solicitado una plaza de invitada especial en Varsovia.
Pero el sorteo no le ha sido demasiado favorable a la ganadora de tres títulos del Grand Slam, porque nada más acabar con Garbin tendrá que enfrentarse con una de las jugadoras más prometedoras del circuito, Wozniacki, cuyos padres son polacos, y que figura hoy lunes entre las diez primeras del mundo, por primera vez, siendo la primera danesa en hacerlo, después de su actuación en Madrid, donde cayó en la final contra la número uno del mundo, la rusa Dinara Safina.
Sharapova ha vencido a Wozniacki en las dos ocasiones en las que se han enfrentado, en Doha (pista dura) y Roma (tierra) y sin ceder un set en ambas, pero la danesa ha irrumpido este año en las listas tras ganar el cuarto título de su carrera en Pontevedra, y ser finalista además de en Madrid en Memphis y Charleston.
La china Jie Zheng, tercera favorita y que ocupa el puesto de abajo en el cuadro ante la baja por lesión de la polaca Agnieszka Radwanska, se impuso a la bielorrusa Olga Govortsova, por 4-6, 7-6 (7-0) y 6-3.