L D (EFE) El de Sant Boi completó una poderosa actuación con 20 puntos y 15 rebotes en la victoria de su equipo frente a los Houston Rockets (111-82), la quinta en cinco partidos de temporada. El español contó con la indispensable ayuda de Kobe Bryant (23 puntos) para doblegar al conjunto tejano, muy concentrado hasta el último cuarto.
Un "alley oop" de Pau Gasol y un tapón de Bryant a Ming apuntaban al comienzo del "showtime" californiano, pero los Rockets le dieron rápidamente la vuelta a la situación y, entre el pequeño Rafer Alston y los movimientos al poste del argentino Scola, enmudecieron al Staples Center (9-22, m.10). Con las segundas unidades en cancha, los Rockets empezaron a despegarse seriamente (16-32), pero entonces, llegó el despertar de los locales. Lamar Odom, Jordan Farmar, Sasha Vujacic, Trevor Ariza y Andrew Bynum se encargaron de reducir la brecha y apretar el partido (36-43, m.19).
Con el trabajo sucio hecho, volvieron los titulares. Y éstos respondieron. Bryant y Gasol dieron lo mejor de sí mismos y el español fue el encargado de devolver a los Lakers la ventaja (48-47, m.23). El 16 angelino completó una gran primera parte, con 12 puntos y ocho rebotes, además de un trabajo defensivo encomiable.
Vujacic sacó brillo al fusil, Gasol anotó desde lejos y Odom hizo gala de su muñeca de seda para un parcial de 7-0 que inauguró el último periodo. El ala-pívot español y su juego de pies, imparable para Scola, habían devuelto la sonrisa al público con un 86-69 inapelable. Los Lakers se gustaron a sí mismos y acabaron el enfrentamiento a tope de revoluciones. El equipo de Phil Jackson avanza firme en este comienzo de temporada (5-0) y durante esta semana viajará a Dallas y a Nueva Orleans, donde pondrá a prueba su condición de invicto.
El ala-pivot español manifestó al término de la victoria de su equipo que cada vez se encuentra "más cómodo" en la posición de ala-pívot, ya que va "cogiendo los hábitos" que tenía antes de desembarcar en la NBA. El español, que tanto en los Grizzlies de Memphis como cuando fichó por los Lakers en febrero se tuvo que amoldar a jugar como pívot, esta temporada ocupa el puesto de "cuatro", ya que Andrew Bynum vuelve a estar a pleno rendimiento tras su grave lesión.
"Voy cogiendo los hábitos que tenía antes de venir a EEUU, sobre todo ofensivamente; voy cogiendo más comodidad, tirar de fuera, jugar abierto, correr más en ataque... me siento bien", confesó el 16 angelino.
"Estoy intentando ser más agresivo desde mi nueva posición, Bynum ha sacrificado rebotes gracias a su trabajo sobre Yao", manifestó el ala-pívot. "Esta victoria era un gran test, contra un equipo muy duro; no empezamos bien, pero tuvimos una gran aportación desde el banquillo y después nos pusimos en control", agregó.
"Hicimos una defensa excelente en el perímetro, intentamos que no tuvieran sus primeras opciones en ataque, los mantuvimos fuera del partido; incluso Yao no estuvo cómodo", afirmó Gasol, que remontó junto a sus compañeros 16 puntos de desventaja en el segundo cuarto.