Cristóbal Montoro ha puesto su punto de mira en la cuenta de los futbolistas. Si primero fue Leo Messi el que fue denunciado por defraudar más de cuatro millones de euros a Hacienda y podría llegar a un pacto para pagar 41 millones, ahora es el portero del Real Madrid Iker Casillas el que ha tenido que desembolsar dos millones.
Según publica el diario La Vanguardia, el capitán blanco ha tenido que afrontar el pago debido a irregularidades en el trato fiscal de algunos de sus ingresos, tras una inspección. A diferencia del caso de Messi, desde la Agencia Tributaria se considera que no ha existido intención de evasión fiscal por parte de Casillas, por lo que su expediente no ha sido denunciado como delito.
El guardameta no es el único jugador de la Selección Española que está bajo investigación. Según informa el diario, Xabi Alonso y David Villa, junto a otros futbolistas de Primera División, también están siendo investigados en el plan de Hacienda contra la ocultación fiscal.